Cumpleaños

Mariló Montero cumple 60 años: de reina de belleza a icono televisivo, entre luces, sombras y reinvenciones

Una vida marcada por los focos, la familia y la resiliencia: así ha sido el camino de Mariló Montero, la comunicadora que convirtió su carácter en marca personal

Mariló Montero
Mariló MonteroJesus BrionesGTRES

Mariló Montero celebra su 60º cumpleaños convertida en una de las figuras más icónicas de la televisión española. La periodista navarra, que soñaba en su infancia con ser azafata y durmió hasta los 13 años en una cama plegable en la cocina familiar, ha vivido una vida de película: concursos de belleza, amor a primera vista con Carlos Herrera, éxitos en la pequeña pantalla, reveses personales y una capacidad para reinventarse digna de admiración.

Criada entre tres hermanos varones en Estella, Navarra, Mariló -de nombre completo María Dolores Leonor Montero Abárzuza- siempre se definió como una niña "chicazo", ajena a los cánones que, curiosamente, la llevarían a alzarse como Maja de Estella y ganadora de certámenes en Tafalla, Navarra y Canarias. Pero fue su empeño por cultivarse lo que la condujo mucho más lejos. En Costa Rica, donde estudió Magisterio y debutó en televisión, empezó una carrera que no tardaría en llevarla a España, donde se convirtió en una de las "chicas Hermida" más recordadas.

Flechazo con Carlos Herrera

Su desparpajo, confiesa, fue clave para abrirse paso. "Me presenté a Jesús Hermida con un descaro descomunal", relató con humor. Aquel atrevimiento no solo le valió un lugar en "A mi manera" (TVE), sino también el flechazo con quien sería su marido durante dos décadas: Carlos Herrera. Juntos formaron uno de los tándems mediáticos más sólidos, con dos hijos -Alberto y Rocío- que hoy triunfan en la comunicación y la moda, respectivamente.

Mariló Montero
Mariló MonteroEspejo Público

Aunque su matrimonio terminó en 2011, Mariló no escatima en palabras de afecto: “Carlos Herrera es, ha sido y será el hombre de mi vida”, afirmó tras su separación. Una declaración que resume su forma de estar en el mundo: directa, emocional y sin filtros.

A lo largo de su carrera, ha sabido navegar entre éxitos televisivos, como "La mañana" de TVE, y tropiezos sonoros que la han convertido en carne de zapping y trending topic. Pero incluso sus meteduras de pata han alimentado su leyenda.

Las pérdidas familiares también han marcado su biografía: su madre falleció de ELA con solo 61 años; su padre y su hermano murieron en accidentes de tráfico. Pero nada la detuvo. Ni siquiera los sinsabores empresariales o el anonimato neoyorquino en el que se refugió tras su salida de TVE.

Hoy, Mariló mira atrás con orgullo. Sus hijos le han dado estabilidad y alegrías, e incluso se avecina una boda: su hijo Alberto se casará pronto con Blanca Llandres, miembro de una saga sevillana muy conocida.

A los 60, Mariló Montero no es solo un rostro de televisión: es un símbolo de tenacidad, de contradicción y, sobre todo, de vida vivida sin pedir permiso.