Primera reacción de Natalia Figueroa al cáncer cerebral de Raphael

Días complicados para la familia Martos. El patriarca, Raphael, ha tenido un serio bache de salud que le ha mantenido durante 10 días bajo observación médica. Mientras se encontraba grabando un especial navideño con David Broncano, el artista presentó dificultades en el habla que alertó al equipo del programa de TVE, que llamó rápidamente a una ambulancia. Por su propio pie, el cantante salió del teatro. Todo hacía indicar que se trataba de un ictus, algo que fue descartado tras los primeros análisis en el Hospital Clínico de Madrid. Después fue trasladado al Hospital Universitario 12 de Octubre, por expreso deseo de la familia, pues ahí conocen bien su cuadro clínico, pues emplazó en ente centro su trasplante de hígado. Pero en la mañana de este viernes Raphael ha recibido el alta hospitalaria, para emplazar en su hogar las siguientes etapas del tratamiento, tras conocerse que tiene un linfoma cerebral primario. No ha querido hablar. Sí lo ha hecho su mujer.

Natalia Figueroa ha estado estos últimos días al pie del cañón, acudiendo religiosamente cada día a estar al lado de su marido, de 81 años. También lo han hecho sus tres hijos, Manuel, Alejandra y Jacobo, quienes han aparcado sus compromisos para presentar un frente unido contra el delicado diagnóstico: “El paciente Rafael Martos Sánchez presenta un linfoma cerebral primario con dos nódulos cerebrales en el hemisferio izquierdo, que justifican los síntomas neurológicos que presentó hace unos días”, rezaba el comunicado emitido en la tarde de este jueves. El mismo que informaba que se le daría el alta en las próximas horas. Esto se ha producido, siendo un alivio para todos.

La mujer de Raphael continúa mostrándose discreta ante los medios, aunque sí ha querido ofrecer un mensaje de tranquilidad cuando se cruzaba con los reporteros. Informaba que todo estaba bien, que se encontraba en las mejores manos y que su deseo era recibir el alta y volver a casa, algo que sucedería cuando los médicos les diesen el permiso necesario. Ahora, después del diagnóstico de cáncer, María Eugenia Yagüe, desde el programa de TVE ‘Mañaneros’, ha deslizado información sobre cómo Natalia ha encajado la noticia. Tras hablar con una de sus íntimas amistades, asegura que lo afronta “como es ella”, lo que quiere decir que lo hace “esperanzada y tranquila”. No ha perdido la serenidad, como así ha mostrado en los instantes en los que se ha dejado ver entrando o saliendo del hospital.

El papel de Natalia Figueroa en estos momentos es crucial. La fiel compañera de vida de Raphael ha sabido transmitirle la necesidad de tomarse la vida con más calma, sacando provecho de los pequeños placeres de la vida. Aun así, no ha conseguido que su marido eche el freno en cuanto a trabajo se refiere. Eso sí, ahora se cuida más. Especialmente desde el 2003, cuando requirió un trasplante de hígado tras presentarle una cirrosis hepática. Ella estuvo fiel a su lado, como así hará una vez más con la misma determinación de que le acompañará en lo bueno y en lo malo, como también están haciendo desde el primer instante sus hijos.