Rafa Nadal emplaza el disfrute de su vida de jubilado en la Costa del Sol

Rafa Nadal acarició las mieles del éxito muy joven y muy joven se ha jubilado. A sus 38 años, el tenista, que cuenta con 22 Grand Slam en su palmarés, decidió que había llegado el momento para aparcar la raqueta a nivel profesional y centrarse a disfrutar de lo cosechado. Ha sido toda una vida dedicada al tenis, lo que le ha hecho ser considerado un héroe nacional, aunque aplaudido tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. Pero él quiere tener una vida sencilla y ver crecer a su hijo Rafael, fruto de una preciosa historia de amor junto a Xisca Perelló, su novia de toda su vida, ahora su mujer y madre de su primogénito. También a sus padres y su hermana, quienes han respaldado su triunfo profesional formando equipo con él.

Ahora a todos les ha llegado el momento de aprovechar los momentos de ocio y saborear los pequeños placeres que ofrece la vida cuando ya no hace falta trabajar. Algo que han emplazado ahora en la Costa del Sol. Nadal ha hecho historia en el deporte español con su talento con la raqueta, pero él siempre ha dejado claro que su éxito es fruto de trabajo en equipo, aunque él sea quien sude la gota gorda en la pista. Su mujer y su familia eran imprescindibles para él, como también lo son ahora cuando toca el momento de disfrutar en Fuengirola, donde han sido vistos acudiendo a un restaurante a saciar su apetito.

Este rincón de la Costa del Sol no es casual y no se ha elegido al azar, pues aquí el tenista ha puesto sus miras para acrecentar su fortuna ahora que ha aparcado la raqueta. Se ha aliado de nuevo con el empresario Abel Matutes para desarrollar un proyecto de viviendas de lujo. En medio de los preparativos y tras visitar dónde se levantará el complejo, el Rafa Nadal y sus íntimos estimularon su paladar en uno de los restaurantes con más renombre de la zona, Los Marinos José, en el mismo paseo marítimo de Fuengirola.