Moda

Jorge Redondo rinde homenaje a Lola Flores con maneras de Balenciaga

Nieves Álvarez y Rosanna Zanetti, entre los famosos que le apoyaron

El diseñador Jorge Redondo
El diseñador Jorge RedondoIfema

Tan solo una hora después de su desfile, que tuvo lugar este lunes en el Centro Cultural Daoiz y Velarde, Jorge Redondo explicaba qué le había llevado a presentar su desfile fuera de calendario: «Yo al final vivo para mis clientas y esto es lo que ellas me pedían». De esta manera, y quizás de forma inconsciente, el creador adoptaba las maneras de Cristóbal Balenciaga cuando decidió dejar de presentar sus colecciones dentro del calendario oficial. Y, como le sucedía al genio de Getaria, a Redondo no le falló ninguna de sus incondicionales. De Nieves Álvarez a Eugenia Osborne, la estilista Cristina Reyes, la fotógrafa Rosa Copado, Sara y Ana Verdasco o Fiona Ferrer, todas acudieron a la llamada de uno de los mayores talentos con los que cuenta la moda española en la actualidad.

Sobre la pasarela, con unas gradas atestadas de público, se pudo ver una colección que rendía un homenaje a Lola Flores que, curiosamente, también era clienta de Balenciaga con quien, además, compartía mismo día de nacimiento: el 21 de enero. Redondo optó por dar su propia versión del universo de La Faraona, en una propuesta que aprobó con Matrícula de Honor. De esta forma, las modelos (entre las que destacaban las internacionales Nuria Rothschild o Mayka Merino) lucieron vestidos donde el color era pura pasión: desde el intenso rojo en un modelo en terciopelo que revivía la pasión de Lola, al negro que recordaba al cabello de la artista. Las lentejuelas también tuvieron su espacio, en versiones en dorado o en aplicaciones de flores que convertían en contemporáneo –si es que alguna vez dejó de serlo– el espíritu de la intérprete de «Pena, penita, pena», un duende que se adivinaba además en los escotes de algunos de los modelos, que resultaban ondeantes como lo era el movimiento de la bailaora.

Desfile de Jorge Redondo
Desfile de Jorge RedondoCortesía

Al final del desfile, donde Redondo se lució con unos voluminosos vestidos de volantes que bien podían haber pertenecido a alguna de las primeras películas de Flores, le acompañó una ovación que puso a todos sus incondicionales en pie. En el backstage, Redondo se mostraba agotado y feliz, mientras recibía felicitaciones de su grupo más cercano, entre los que figuraban sus padres y su abuela, muy orgullosos de lo que estaba consiguiendo su hijo y nieto en una carrera que parece que todavía no tiene meta.

Después la fiesta se trasladó hasta el barrio de Tetuán: en el restaurante Desde 1911, uno de los sitios de moda de la capital, el diseñador organizó su fiesta y cena de celebración, donde se pudo comprobar la sintonía que tiene la pareja formada por Pepe Barroso y Gara Arias. Hasta allí también acudió Rosanna Zanetti, que desbordaba simpatía mientras buscaba el aire de un abanico o Mayte de la Iglesia, que conoce bien la carrera de Redondo. Paula Babiano, la fundadora de Balbisiana (las tartas más buscadas de España) también se dejó ver, aunque, eso sí, el postre no lo ponía ella: eran torrijas. A Lola le hubieran encantado.