Los sábados de Lomana: Grandes actores que hemos perdido

He decidido no decir ni una palabra de esa panda de traficantes de mascarillas que avergüenzan. Lo que es increíble son las dotes para el teatro de los dirigentes del PSOE. ¿No les ocurre a ustedes que cuando escuchan hablar a Ábalos poniendo cara de sufridor (cuando siempre la tuvo de malo de la película) da hasta pena? Pues eso. A Sánchez «El resiliente» se le están poniendo las cosas muy, muy feas. ¿Lo veremos caer en manos del perverso Puigdemont? Esta serie se está poniendo interesante y de suspense.

Hablando de series de suspense, ninguna como el estreno de Amazon Prime, «La Reina Roja», ¡Impresionante! Un thriller en toda regla. Oscuro, inquietante, con violencia, intriga, pasión y suspense. No recuerdo desde hace mucho tiempo haber visto nada igual. Maravillosamente dirigida por Koldo Serra y basada en la novela de Juan Gómez-Jurado. Todo el equipo de actores es espectacular y la protagonista, Vicky Luengo, perfecta, así como su «partenaire» Hovik Keuchkerian, maravilloso actor español de origen armenio libanés. Tengo que reconocer que durante toda la proyección estuve sobrecogida e incapaz de moverme. Atrapa de una forma terrorífica. Estoy segura de que a los seres humanos nos chifla pasar miedo cuando sabemos que estamos en zona de seguridad, pero al salir a la noche de un Madrid lluvioso y con viento yo tenía miedo. Solo quería verme segura en mi cama. Enhorabuena, equipo de «La Reina Roja» por un trabajo magnífico.

Otra gran película que he visto esta semana en Netflix es «Maestro», basada en la vida del gran compositor y músico judío americano Leonard Bernstein, uno de los más influyentes del siglo XX. Dirigió la Orquesta Filarmónica de Nueva York y una de sus obras más conocidas como compositor fue «West Side Story» (1957). La película es interesantísima y se puede conocer un momento en Nueva York, con una actividad cultural y musical impresionante en la que por encima de todo sobresalía Bernstein con su talento y forma prodigiosa de dirigir.

En un momento podemos escuchar la Sinfonía nº 4 de Mahler, dirigida por él, que es un prodigio. Su mujer, Felicia Montealegre, era brillante, muy progresista y moderna, amaba con locura a Leonard, con el que tuvo tres hijos, pero también sufría por el juego de su marido con chicos jóvenes a los que era muy aficionado. En Nueva York todo el mundo moría por ser invitado a las fiestas de esta pareja que no tenía ningún prejuicio en invitar a «Los panteras negras» y mezclarlos con lo más variopinto de la sociedad neoyorquina. Bernstein y ella fumaban sin parar y vivían al límite. Murieron jóvenes. Felicia, de cáncer de pulmón a los 56 años, y el compositor a los 72, de enfisema pulmonar e infarto de miocardio. Entonces nadie era consciente de lo malo que podían ser el tabaco, las drogas y vivir peligrosamente.

Ahora nos dicen que no se nos ocurra tomar café, más de una taza, y mucho menos fumar. Comer sano, hacer ejercicio, dormir ocho horas, meditar y darnos baños de sol. Bastante incompatible con una vida laboral y social activa. Suena bien, intentamos hacer lo que podemos, pero para mí lo mejor es disfrutar la vida. Y vivir intensamente. La bondad y la empatía entre los seres humanos también ayuda mucho a vivir más felices. Estamos ya en marzo, cada vez más cerca de la primavera.