Sam Ashgari, exmarido de Britney Spears, rompe su silencio sobre la tutela de la cantante y su divorcio

Britney Spearsy el bailarín Sam Ashgari mantuvieron una relación durante seis años, pero todo lo que hacía con él pasaba bajo el "filtro" de Jamie Spears, el padre de ella. La cantante llevaba once años bajo la tutela de su progenitor, que supervisaba todos los movimientos de la artista, así como todas sus decisiones. En 2021, asesorada por abogados y respaldada por la plataforma creada por sus fans bajo el nombre de #FreeBritney, Spears inició una batalla judicial gracias a la cual recuperó su libertad y pudo casarse con Ashgari. El compromiso se rompió 14 meses después.

Sam Asghari y la cantante se conocieron en el rodaje del videoclip "Slumber Party", en el que él era bailarín. "Fue la espiral más difícil y extraña de la que he sido testigo en mi vida", ha revelado ahora en el programa de los hermanos Kate y Oliver Hudson, Sibling Rivalry, sobre el periodo de tutela de Britney.

"Hablamos y hablamos, estábamos solteros, fuimos a comer sushi a un restaurante, y todo empezó a ir muy bien. Hasta que un día empecé a saber lo que era una tutela y fue como: 'Espera un minuto, pensaba que estábamos en Estados Unidos. ¿Qué es eso de que alguien de más de 18 años necesita permiso de sus padres? Pero yo era muy nuevo aquí y... es algo absolutamente ridículo que tiene este país", recuerda. "Yo era muy nuevo aquí y... es algo absolutamente ridículo que tiene este país", ha criticado.

"En Hollywood y en el mundo del entretenimiento la gente te dice que lo difícil es lidiar con los fans, el dinero y todo eso. Pero lo más difícil es que tus padres y la gente a tu alrededor saque ventaja de ti y te haga daño, porque son las personas más cercanas a ti. Nunca son los fans, nunca es la prensa. Hay razones por las que eres popular y famoso, como la prensa y los fans, y ellos no te van a herir. Es quienes tienes a tu alrededor, a quienes permites entrar en tu círculo, eres vulnerable ante ellos y se aprovechan, porque creen que les debes algo, lo que es absurdo", reflexiona.

Cuando Britney decidió iniciar la batalla judicial para lograr su libertad, él la apoyó para "protegerla y luchar por ella". "Darle tanto apoyo como pude, estar allí, proporcionar información que podría ser útil, recursos que podrían ser útiles, y realmente tratar de entender por qué esto llegó a suceder, por qué la tutela incluso sucedió, para empezar. Simplemente eso, esa fue mi experiencia vital, que tuve que pasar de manera muy discreta, por si haces algo mal, dices algo equivocado, ya sabes... Y por suerte tener la experiencia de venir de otro país con la que tuve que lidiar... Pues todo se pone en su lugar. Fue una época muy difícil... Pasamos muchas cosas como pareja, aprendimos mucho, fue una experiencia bonita".

Ahora, ya divorciados, mantiene un buen recuerdo: "Divorcio, separación... las rupturas son un asco, por supuesto, pero siempre he tenido en mente que no quiero estar triste porque se acabó. Siempre voy a estar agradecido y feliz de que llegara a suceder", concluye.