Tamara Falcó e Íñigo Onieva queman juntos los excesos de su último fin de semana romántico en el País Vasco

 Tamara Falcó e Íñigo Onieva han vuelto a realizar una escapa este fin de semana. La pareja, que regresó de Londres hace tan solo cino días por el cumpleaños de la socialité, ha disfrutado de otro viaje exprés al País Vasco. El matrimonio se ha trasladado al norte de nuestro país para seguir comiéndose el mundo literalmente a bocados. Hospedados en un lujoso hotel de San Sebastián, los marqueses de Griñón han visitado los mejores restaurantes de la zona, como Narru o Asador Etxebarri de Atxondo, el tercer mejor restaurante del mundo. En menos de un mes, Tamara e Íñigo han estado dos veces en el "templo" gastronómico del chef Bittor Arginzoniz.

A lo largo de este fin de semana, la pareja ha combinado sus festines gastronómicos con el turismo de la zona. Entre comida y comida, el matrimonio ha aprovechado para hacer largas rutas de senderismo por la naturaleza o entrenar en el gimnasio del hotel para quemar todos los excesos de estos días. Íñigo Onieva ha sido el encargado de compartir una fotografía de ambos haciendo deporte junto a la siguiente frase: "Burn, eat, repeat". Parece ser que los marqueses de Griñón han decidido cuidarse para poder seguir disfrutando de toda la gastronomía del planeta. Desde que volvieron de su luna de miel, Tamara y su marido han viajado por todo el continente degustando la mejor comida de la zona. Amalfi, Roma o Copenhague han sido algunas de las ciudades visitadas por la pareja estas últimas semanas.

En esta último viaje, la socialité y el empresario también han sacado tiempo para visitar el museo de Chillida Leku. La marquesa de Griñón, muy emocionada por haber conocido el recinto de la mano del nieto del escultor, ha compartido una publicación en su perfil de Instagram. "Ver el museo de Chillida Leku de la mano de Mikel Chillida ha sido una experiencia inolvidable ¿Cómo es el conocer lo que rodea a un artista detrás de su obra? Ya admiraba a Chillida antes pero escuchar cuales eran sus inquietudes, como lo era el alma versus la gravedad de Newton, me ha hecho admirarle mucho más. Íñigo y yo salimos queriendo ahorrar para alguna vez tener una de estas joyas totalmente únicas en nuestro hogar… ojalá", ha escrito la hija de Isabel Preysler junto a un carrousel de fotografías de su visita.

No sabemos con qué destino nos sorprenderá la pareja en su próxima escapada, aunque no sería de extrañar que fuese este fin de semana. Tamara e Íñigo se han propuesto conocer todos los lugares del planeta juntos y degustar lo mejor de su gastronomía. Como buenos "foodies", los marqueses de Griñón comparten su pasión por el buen comer y aprovechan cualquier rato libre que tienen para poder seguir manteniendo su figura entre festín y festín.