Victoria y David Beckham lloran las penas por su hijo Brooklyn en un yate de 16 millones de libras

La compositora y productora brasileña Jackie Apostel ya es, sin lugar a dudas, una más en la glamurosa familia Beckham. La artista mantiene desde hace meses una relación sentimental con Cruz Beckham, el benjamín de Victoria y David, a quien supera en edad por casi una década. Sin embargo, esta diferencia no ha sido obstáculo alguno para que Jackie se gane rápidamente la simpatía y la complicidad del mediático clan.

Su primera aparición pública con los Beckham se produjo el pasado octubre, durante uno de los desfiles de Victoria en París. Desde entonces, su presencia ha ido consolidándose. Esta semana, su integración ha dado un paso más al unirse a las vacaciones familiares en la idílica Costa Azul.

Las imágenes captadas el lunes y difundidas por la prensa británica muestran a una emocionada Victoria Beckham recibiendo a su hijo Cruz y a Jackie a bordo del yate familiar, una embarcación valorada en 16 millones de libras, atracada en el exclusivo puerto de Saint-Tropez. El ambiente no podía ser más distendido: abrazos, sonrisas y gestos de afecto se sucedieron a lo largo del día, especialmente entre Cruz y sus célebres padres, con quienes compartió un refrescante baño en las aguas cristalinas del Mediterráneo.

Entre los invitados se encontraba también la inseparable Eva Longoria, acompañada de su esposo José Bastón. La actriz, que además es madrina de Harper, la hija menor de los Beckham, disfruta desde hace años de una entrañable amistad con Victoria.

Quien brilló por su ausencia fue Brooklyn Beckham. El primogénito de David y Victoria parece seguir distanciado de su familia. Mientras el resto del clan disfrutaba en Saint-Tropez, Brooklyn navegaba por las mismas aguas en un espectacular yate de 85 millones de libras junto a su esposa, Nicola Peltz, y su familia política. A pesar de encontrarse en el mismo puerto, no hubo reencuentro: los Beckham llegaron solo unos días después de la partida de los Peltz, un detalle que muchos interpretan como una muestra más del creciente distanciamiento.

Y aunque Victoria sigue dándole "me gusta" a casi todas las publicaciones de su hijo en Instagram, los observadores más atentos han notado un patrón revelador: evita interactuar con aquellas fotos en las que aparece su nuera, Nicola. ¿Descuido inocente o declaración sutil de intenciones? La tensión, como siempre en el universo Beckham, se cuece a fuego lento… pero a la vista de todos.