Nueva York
Irina Shayk, acosada en su piso de Nueva York
La sensación de sentirse observadas es habitual en las pasarelas, y las grandes modelos lo tienen superado e implementado como algo de la rutina diaria. Sin embargo, en algunos casos se esconde una oscura obsesión. A Irina Shayk le ha salido un fan que parece haber hecho de su acoso la razón de su patología. Según revela el «New York Post», la joven de 27 años ha solicitado una orden de alejamiento contra un individuo que durante meses ha estado rondando el edificio del West Village, en Nueva York, donde ella vive actualmente. Pero la sospecha de que este hombre está detrás de ella no viene de ahora. Irina ya presentó dos denuncias contra un hombre que la esperó en varias ocasiones en la misma puerta de su casa y, según la Policía de Nueva York, habría incluso llegado a meterse dentro del apartamento. Para corroborar esto, Shayk acompañó las quejas con grabaciones del vídeo de seguridad del edificio con el fin de denunciar el envío sistemático de regalos, flores y otros objetos durante al menos dos años por un agresor no identificado.
Allanamiento
El momento de terror llegó cuando tras los destrozos del huracán Sandy sobre la ciudad de Nueva York en octubre de 2012, la casa de la modelo estaba inmersa en las obras de reforma y, aprovechando los andamiajes, el citado tipo llegó a colarse dentro del edificio y en su piso. Fue la propia Irina quien, al llegar a casa después de hacer unas compras, se dio cuenta de que había alguien en su domicilio con ella. Optó por salir corriendo y llamar al teléfono de emergencias. Cuando llegó la Policía, el hombre ya había conseguido huir. Aunque Shayk presentó una denuncia por los hechos, no se hizo ningún arresto.
Pero el domingo pasado fue alertada por sus vecinos y empleados del edificio de que su acosador había vuelto ese día a merodear por la zona, esta vez sin acercarse al portal o a su casa. Esto llevó a una nueva queja de la modelo a la Policía y su decisión de interponer una orden de alejamiento contra este fan. El entorno de la joven coincide en que se encuentra «muy asustada» por estos hechos, como corroboró un testigo de la llamada que hizo Irina a un amigo momentos después de enterarse de que el acosador había reaparecido. «Ella caminaba arriba y abajo por los pasillos explicándole a una amiga que tiene un acosador y que se ha presentado en su nuevo apartamento», cuenta el testigo. Parece que se encuentra muy alterada tras varios años con esta historia aunque no había trascendido a los medios de comunicación hasta ahora. Según la misma fuente, «nunca la había visto comportarse así antes. Ni siquiera pretendía susurrar mientras lo contaba. Incluso intenté llevármela aparte para decirle que una tienda no es el mejor sitio para hablar del tema».
Estos días hemos podido comprobar a través de las imágenes cómo la modelo se esconde durante sus paseos por Nueva York e incluso va siempre acompañada por un amigo en sus desplazamientos cotidianos. Irina, que reside en la ciudad por temas de trabajo, parece que se ha quedado sin las esperadas vacaciones a las que nos tenía acostumbrados por estas fechas en algún lugar paradisíaco y acompañada de Cristiano, después de que hayan desmentido la supuesta relación del jugador con la modelo brasileña Andressa Urach.
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