La nueva vida del fundador de Forocoches

El creador del polémico «bar digital», pone fin a su «cibervida» para centrarse en sus hijos, que cuida en régimen de custodia compartida, en el fútbol y los patines. «Forocoches tiene lo peor y lo mejor de nosotros, lo más ocurrente, lo más zafio y lo más sublime, como la vida».

Los españoles somos de bares. Nos encantan los bulliciosos cenáculos como en el que se ha convertido ForoCoches, con más de 120.000 personas que entran en él cada día como quien va de tapeo o a tomar unos chatos y de paso habla de política, de fútbol, de su pareja o de la del vecino. Igual que en cualquiera de esos garitos en los que, entre trago y trago, nos dan las tantas de la madrugada, aunque en él no se sirva ni un humeante café. Son tiempos críticos para España y lo que aquí ocurre es una sucesión de historias cruzadas, de miles de personajes que quieren reflexionar y expresar su cansancio por la política. Unos insólitos, otros normales y algunos geniales. Con ocupación o sin ella. De izquierdas, de derechas, ambiguos y neutros. Tipos bien acomodados y otros con graves apuros. Todos muestran una instantánea puntual de su vida, un razonamiento o simplemente cualquier exabrupto. Detrás de esta peculiar barra está Álex Marín. Palentino, a punto de cumplir los 40 y elevado casi a la condición de mito, algo así como un Mark Zuckerberg (cofundador de Facebook) a la española. Pero nos acercamos al hombre real, al padre de dos hijos a los que cuida con una custodia compartida.Competidor fuera de lo común y con un excelente nivel de confianza en sí mismo, pero sin levantar los pies del suelo. Su poder de influencia es difícil de tasar si tenemos en cuenta que los usuarios de ForoCoches suman mucho más que los afiliados a cualquier partido político. Y aquí no hay cifras fantasmas: 821.876 en el momento de cerrar este artículo. Hasta hace un par de años, casi nadie sabía quién era. Hoy ya le saludan o le felicitan. No le molesta, pero ha decidido poner su vida personal en «modo privado».

Entre la gimnasia artística y el fútbol

«He desaparecido de las redes sociales. Tengo una cuenta verificada en Instagram con más de 130.000 seguidores, pero borré todo y no subo ninguna foto desde hace meses. Me aportaba poco valor». En los últimos años ha bajado el ritmo, a pesar de que no para. Sigue una rutina en los horarios, su alimentación es sana y practica deporte. De pequeño empezó con gimnasia artística y más tarde jugó al fútbol de portero. Un día se plantó ante el entrenador con su stick de hockey y le dijo que dejaba el balón. Hoy compagina los patines con el gimnasio. «Ser emprendedor requiere una alta autoestima y el deporte enriquece esta percepción», cuenta en su libro «El motor del éxito» (Planeta de libros). En él plasma también la relevancia que da al dinero: «Lo importante es que te quite trabajo y te garantice tiempo para hacer lo que más te guste. Además, tienes que conseguir que el propio dinero genere más sin necesidad de trabajo». Aunque no se prodiga en los medios, ha accedido a recibir a LA RAZÓN en su ciudad natal, Palencia. «El proyecto empezó como una necesidad personal, fue una extensión de otro foro que había creado anteriormente para compartir experiencias, problemas y soluciones con un coche que me acababa de comprar», explica. No le sorprendió su crecimiento porque en aquel momento ya tenía varios proyectos muy populares en internet y continuaba lanzando nuevos sin parar. «Sabía que alguno, antes o después, iba a destacar, aunque el éxito del foro ha eclipsado todo lo demás». Desde entonces han pasado ya casi 17 años y en él se fraguaron innumerables anécdotas, historias y fenómenos políticos y sociales. «Teniendo una visión global y sabiendo filtrar, es bastante fácil medir y cuantificar tendencias desde una plataforma tan viva y rápida. Sin duda, el 15-M fue un movimiento que se vivió y se pudo presagiar en el foro. Eran tiempos de crisis en los que mucha gente estaba harta. Movimientos así siempre se ven antes en internet, ya sea en Forocoches, Twitter o Facebook».

Pioneros en «cazar» a Abascal

Otro ejemplo, dice, es la subida de partidos como Podemos o VOX. Esto era algo que se podía anticipar claramente en el controvertido foro y en las entrevistas tipo «Ask Me Anything». «Ya hicimos una a Abascal en el año 2017 cuando su presencia en la calle y en medios generalistas era prácticamente inexistente». Precisamente a finales de ese año obtuvo el récord de páginas vistas en un mes: 160 millones. «Tuvo mucho que ver la actualidad política en plena efervescencia con la declaración unilateral de independencia de Cataluña y la aplicación del artículo 155 de la Constitución». Marín reconoce que en estos 17 años el foro ha dejado de ser su criatura para convertirse en una obra de la comunidad en continuo crecimiento y noticia en ocasiones de los informativos. Desde la pantalla de su ordenador ha asistido a movimientos colectivos de todo tipo. Algunos realmente insólitos. En 2016, por ejemplo, votaron para elegir el nombre del nuevo buque de investigación polar del Consejo de Investigación de Medio Ambiente del Reino Unido. Apostaron por el nombre de Blas de Lezo, un héroe español de la época de Felipe V cojo, manco y tuerto. A punto de colocarse como el más votado, la Royal Navy borró esa opción por considerarla una ofensa. En 2013, cuando el diario británico «The Telegraph» preguntó a sus usuarios si Gibraltar era territorio español o inglés, se produjo una abrumadora victoria a favor de España con cerca de 300.000 votos frente a 18.000 movilizada desde ForoCoches. «Lo peor y lo mejor de nosotros, lo más ocurrente, lo más zafio y lo más sublime, como la vida, eso es ForoCoches. Como un bar gigante trasladado a la red donde hay charlas, noticias y bulos». Aunque no anticipa resultados para nuestro futuro político más inmediato y aclara que ForoCoches es una plataforma neutra que permite el intercambio de opiniones sin que se inclina por una ideología u otra. A nivel personal, se muestra decepcionado. «No tengo ningún interés en la política. El sistema está mal diseñado. El objetivo de un Estado debería ser gestionar el país de forma eficiente para mejorar la calidad de vida. Lo que en realidad ocurre es que todo se centra en gestionar los partidos, utilizar psicología de masas para provocar divisiones entre la gente, crear grupos sociales e influir en los medios».

«Tontos inútiles»

La política para él no está en ese grupo de cosas cuyos resultados pueda controlar o alterar mínimamente. «Mi voto individual, como el de cualquiera, no vale nada, por lo que no lo dedico ningún tiempo ni me preocupo por ello». Sin embargo, al tiempo que habla, 28.700 personas charlan en este lugar de tertulia al más puro estilo de El Café de doña Rosa que recreó Camilo José Cela en «La Colmena». Falta la tabernera que describió el autor con sus manos gordezuelas apoyadas sobre el vientre, hinchado como un pellejo de aceite. La política es rutina y a pocas horas de conocer el resultado de las elecciones, una pequeña encuesta que abre uno de sus usuarios con el epígrafe Forovox avanza el 77,27% de los votos a VOX y el 11,35% al PP. El resto se lo reparte la izquierda. En los últimos días, al partido de Abascal se le da continuamente la vuelta, del derecho y del revés. Hattrick1982, uno de sus usuarios, expone sus razones para votar a Vox. Declarativo, otro forero habla de su estrategia de manipulación para conseguir miles de «tontos útiles». Con una estructura muy simple, el foro dibuja un retrato social plural y muy potente, con un lenguaje muy a ras del suelo, a veces soez. Está a punto de alcanzar los 350 millones de mensajes. Son pequeñas historias abiertas con un relevo continuo de personajes. «Al final –señala–, más que una web, es una gran comunidad con un alto sentimiento de pertenencia. Encuentras información útil de lo que quieras, preguntas y obtienes respuestas. Leerás hilos de humor o podrás participar en acciones conjuntas, como troleos para divertirte o ayudar de forma altruista». El anonimato y la privacidad permiten contar experiencias personales, como rupturas amorosas, experiencias sexuales, problemas laborales, opiniones políticamente incorrectas. El único límite es la ley. «Trabajamos con la Policía y la Guardia Civil para reportar cualquier ilegalidad y facilitar la identificación. En los casos más sonados donde se ha cometido algún delito en toda la red u otros medios, siempre hemos sido la plataforma que más rápido lo ha detectado». Es difícil no imaginar a Marín como un Gran Hermano que contempla lo que acontece en la sociedad y, como tal, le pedimos su particular diagnóstico: «Hay ideas más radicales o extremistas que lo que se puede observar en la calle, pero es un espejo de un perfil bastante amplio de la sociedad. Si hay hartazgo con los políticos, si surgen o crecen de forma notable nuevos partidos, si hay un torneo de fútbol o una película como «Joker» que arrasa, eso siempre se está reflejando en tiempo real».