Fotografía

Los nuevos amigos de Marichalar

La Razón
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Al teclear en Google las palabras «Jaime de Marichalar amistades», surgen 43.700 resultados en 0,26 segundos. El primero y más directo de los enlaces es el de Vanitatis.com, cuyo artículo explica los últimos movimientos del ex duque de Lugo por Madrid, Barcelona e Ibiza con sus nuevos amigos íntimos. Ya tiene 50 años y han pasado casi seis desde que cesó temporalmente su convivencia con la Infanta Elena.

Atrás han quedado Marisa de Borbón, Nati Abascal, Manolo Blahnik o los propietarios de diferentes emporios de la moda. Ha cambiado de pandilla. Ha elegido rejuvenecer junto a gente más fresca, moderna y divertida. Sin embargo, esto no significa que Cari Lapique y Carmen Martínez-Bordiú no sigan haciéndole la rosca. Desde su separación, ha dado muy poco que hablar. Se ha dicho mucho, pero poco era cierto. Ha sido víctima de una campaña de desprestigio personal y social brutal. Y, sinceramente, no se lo merecía. El tiempo le ha dado la razón y su cuñado el deportista le ha trasladado a la ejemplaridad. Incluso, el Príncipe de Asturias le saludó con cordialidad durante la final del Roland Garros, un hecho que no ocurrió en el campeonato del mundo de balonmano, celebrado en Barcelona.

Y, pregunto: ¿por qué las supuestas fotografías que existen de don Jaime en Ibiza con sus nuevas amistades todavía no han visto la luz? Ya deberían haberse vendido de ser cierto lo que se confirma a través de las instantáneas captadas por un paparazzi: que esta ilusionado, enamorado y feliz. Pero, ¿existen realmente? Lo pongo en duda. Si por algo se conoce a Marichalar es por su extremada timidez y poca expresividad en lo que al amor se refiere. Recuerden que en el reportaje robado por Antonio Montero durante su viaje de novios a las Antípodas, fueron pocos o ninguno los arrumacos que la pareja se regaló en las solitarias playas.

En definitiva, lo único que me queda claro es que los fines de semana que no tiene a los niños, prefiere volar a Ibiza. Lo demás, compañera sentimental incluida, está por ver.