Ni un «pero» para la mujer del presidente

Es de las mujeres que más me ha impresionado cara a cara en mi vida. Una gran señora a la que, por una vez en esta sección, no le voy a aconsejar que cambie un ápice de su aspecto físico. Tuve la suerte de conocerla en su visita a España, cuando pasó unos días en el hotel Villa Padierna de Marbella. Una señora que impresiona, y no sólo por su altura, sino que todo en ella es elegancia: su permanente y gran sonrisa, su forma de moverse... en definitiva, su actitud.

Lo único que le puedo decir es que se siga manteniendo tan bella y, para ello, le recomiendo que vuelva una vez al año a Marbella y repita el ya mítico ritual que el Spa del Hotel VillaPadierna creó en su honor: el «Michelle Obama Deluxe». Un tratamiento que consta de un circuito aromático hidrotermal y facial que combina dermoabrasión con punta de diamante, triple oxígeno, radiofrecuencia y estimulación muscular en una sola sesión. Un tratamiento único que regenera en profundidad las células aportando luminosidad, además de remodelar el óvalo facial, reafirmar el tejido de forma inmediata gracias a la radiofrecuencia y tonificar la musculatura gracias a la electroestimulación. Resultado espectacular inmediato a corto y a largo plazo (www.hotelvillapadierna.com).

CÓMO SERÁ DENTRO DE 20 AÑOS

Para que Michelle siga tan estupenda como está ahora, le recomiendo que una vez al año vuelva a Marbella a disfrutar del circuito que crearon en el Hotel VillaPadierna en su honor. Un tratamiento a base de trufa blanca y oro, de Maria Galland.