Málaga sienta bien: B de Beauty Congress de Silvia Moreno

Esta semana algunas han celebrado el Día de la Mujer, pero yo opino que es un día que tenemos que celebrar todos los días, porque ser mujer en estos tiempos es hacer mil malabarismos para llegar a todo: trabajo, familia, amistades, y, sobre todo, cuidarse una misma. Porque como dice el doctor Mario Alonso Puig “Quien se ve mejor, también se siente mejor”. Y hay que sentirse bien para luchar cada día con una sonrisa para seguir siendo un ejemplo para nuestras hijas y futuras mujeres del mundo.

Escuchar al doctor fue un privilegio que tuve el fin de semana pasada gracias a una mujer de bandera, una empresaria que se ha forjado a sí misma, Silvia Moreno, que organizó el segundo congreso de belleza llamado B de Beauty Congress en su querida Málaga.

Y es que Málaga está de moda. Empezando por el festival de cine que abre hoy viernes sus puertas, el número 26 de su existencia; siguiendo por el malagueño universal que consiguió que toda una actriz de Hollywood viviese con fervor su Semana Santa, hablo, claro está de Antonio Banderas; o recordando el genio de Pablo Ruiz Picasso que tiene su propio museo en su ciudad natal.

La ciudad de Málaga además de ser destino de sol es destino de cultura, porque además del museo que he mencionado, cuenta con otros dos tan importantes como el Museo Carmen Thyssen de Málaga o el Centre Pompidou, una sede del original de París que se encuentra ubicado junto al puerto.

Y sol es lo que tuvimos, mis queridas compañeras periodistas de belleza y yo en el maravilloso hotel MS Amaragua que fue la sede del congreso de Silvia Moreno. Silvia Moreno, licenciada en Derecho, comenzó en el sector de la estética como micropigmentadora experta en microblading de cejas, y tras años de experiencia desarrolló una técnica propia: el silvyblading.

Debido a su interés por la mejora del conjunto del sector, decidió compartir sus conocimientos en redes sociales organizando formaciones para esteticistas, lo que le ayudó a darse a conocer en toda España y Latinoamérica entre las profesionales de la estética.

Tras años ejerciendo como formadora, esteticista y empresaria, Silvia Moreno y su equipo comenzaron a investigar sobre la importancia de utilizar los pigmentos y cosméticos más avanzados para lograr los mejores resultados en cabina. Acudió a numerosas ferias y congresos por todo el mundo hasta que encontró la mejor cosmética en Corea.

Fue entonces cuando nació Silvia Moreno Professional Cosmetics con el objetivo de ayudar a todas las profesionales del sector a lograr la excelencia técnica junto a los mejores cosméticos del mercado. Esta pasión le guio hasta ofrecer la mejor cosmética del mundo a todas aquellas mujeres que deciden cuidarse en casa y a los centros de estética, gracias al apoyo incondicional de su pareja, Juan Vallés, todo un caballero y un gran anfitrión.

“Queremos mejorar el conocimiento y la confianza de las profesionales del sector, y el acceso de todos los mejores productos del mundo. la estética y la cosmética son mi pasión y mi filosofía de vida”, declara Silvia.

Y es que este Congreso nació para ellas, las esteticistas, para proporcionarles formación y reconocimiento, ya que es precisamente en él, donde Silvia escoge a sus embajadoras anuales entre sus centros oficiales; centros de estética donde ofrecen la cosmética coreana de Silvia Moreno Professional Cosmetics.

Tres días totalmente experienciales en los que los asistentes, medios de comunicación y perfiles reconocidos del panorama nacional han podido reunirse y disfrutar de los mejores profesionales y ponencias, todo ello con la tecnología más vanguardista y avanzada.

Una cita única que ha servido para dar a conocer los últimos avances e información valiosa del mundo de la belleza y posicionándose como el congreso de referencia en el cuidado de la piel, el cabello y las uñas.

El doctor Mario Alonso Puig fue uno de los ponentes VIP del sábado, especialista en el pensamiento humano y doctor en Medicina por la Universidad de Harvard, habló de la importancia del trabajo de las esteticistas, que con sus manos hacen que cada persona que acude a un centro de estética se sienta mejor, porque el contacto es vital. Nos contó una anécdota de sus días de trabajo como cirujano, y es que uno de los anestesistas que trabajaba con él estaba asombrado de que sus pacientes estuvieran más tranquilos que el resto durante la operación, ¿y cuál era el truco? Algo tan simple como tocar en el brazo a la persona que iba a ser operada y decirle: “tranquilo, tranquila, todo va a salir bien”. Y es que escuchar a Mario Alonso Puig fue de los mejores momentos del día. Nos hizo practicar la meditación metta que había aprendido en un retiro en Bután, el reino de la felicidad. Así que les recomiendo que le sigan en redes y vean sus vídeos, proporciona calma y serenidad. Y además hace una pareja estupenda junto a su mujer Isabela, elegante y la perfecta compañera y con la que tuve el placer de reencontrarme porque hemos coincidido en clases de cocina varias veces. Y como mujer orgullosa tuvo la satisfacción de ver cómo todo el público se ponía en pie para ovacionar a su marido, porque fue un momento mágico y como reconoció la propia Silvia Moreno, un sueño, gracias al empeño de Isabel y de su socia Lucía, de su agencia de comunicación Myownpress.

Y hablando de mujeres, también nos divirtió mucho escuchar a la más espontánea de las criaturas, la siempre divina Carmen Lomana, que nos estuvo contando sus trucos de belleza y cómo la cosmética coreana ha entrado en su vida para quedarse. Yo me quedaría con el maravilloso vestido blanco que lució en su presentación, y que a sus setenta y cuatro años le quedaba como un guante, pero como ella reconoció, en parte, estar así de estupenda se debe a que “solo me ocupo de mí misma, no tengo familia, y siempre, siempre, me rodeo de jóvenes”.

Después tuve tiempo de visitar una capilla que me enamora, y es que esta ciudad fue testigo de mi boda hace ya casi 12 años, y he vivido tantas cosas bonitas en ella, que la llevo siempre en mi corazón.

Y corazón es lo que desbordaba este congreso, porque por la noche tuvimos cóctel y cena de gala, que tenía un fin solidario, ya que los ingresos obtenidos estaban destinados a tres fundaciones dedicadas a la investigación contra el cáncer y la infancia; como la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), la Fundación Lágrimas y Favores de Antonio Banderas y la Fundación Olivares.

Fueron muchos los asistentes a la gala del sábado, que fue presentada por la periodista Alicia Senovilla, derroche de profesionalidad y de buenas tablas, que a pesar de su resfriado lució espectacular y con un auténtico vestidazo; y tuvo como partenaire a Patricia Cerezo, la ex mujer del gran Ramonchu, el mejor presentador de las campanadas de Fin de Año.

También estaba David Deibis, el maravilloso maquillador que ha trabajado para Versace o Chanel, y artistas como Salma Hayek y Nicole Kidman entre muchas otras; reconocidos homeópatas como Bernat Domene creador del sistema de aparatología facial y corporal Bellaction; el CEO de la firma OVACO que Silvia Moreno distribuye en exclusiva y que tuvo un traductor malagueño que lleva más de once años estudiando coreano y que debía hacerlo más que bien, ya que el propio CEO dijo que lo hablaba sin acento.

Y es que Corea también está de moda, y su cosmética aún más, todos los productos OVACO formulados por una avanzada tecnología y fórmulas de investigación y desarrollo del Instituto de Ciencias Bio Cell Fusion que utilizan solo ingredientes científicos poderosos, y eso se nota, yo ya soy fan de la ola de Corea.

El menú de la cena fue un acierto y disfruté especialmente de un salmorejo de aguacate de la Axarquía con tartar de gamba blanca, mientras el actor y cantante malagueño Pablo Puyol, nos deleitaba con su voz. Sí, ese actor tan alto y guapo que salía en UPA Dance y que es tan buen actor de teatro.

El reconocimiento de las nuevas embajadoras de Silvia Moreno me recordó lo que he vivido durante mucho tiempo con la gran Carmen Navarro, y es que al final son las que tienen entre sus manos la clave para que un negocio y una marca funcionen, como le ocurre a Silvia.

Porque señoras y señores, si no conocen el ritual coreano facial de células madre de Silvia Moreno beauty ya están tardando. Es lo primero que hice al volver a Madrid, acudir a su centro Poom a probarlo, y me quedé maravillada con el ritual, con las manos de Ana María ,su esteticista, con todos los pasos, los productos, la D-tok Gua Sha de cerámica artesanal que usaron y el resultado en mi rostro, para repetir una y otra vez. Y como lo tienen todo tan bonito, piqué y compré, porque sí, las mujeres que trabajamos facturamos, y por eso me puedo permitir caprichos como el Egostic, un stick hidratante facial para llevar siempre en el bolso e hidratarte en cualquier momento, perfecto para los viajes en avión o nuestra vida tan atareada de periodistas de belleza; un perfume íntimo que me pareció lo más,Aromacology, 100% natural y a base de aceites esenciales, para poner unas gotitas en la ropa interior; o sus best seller, el dúo de cremas corporales, Power y Boosting.

Y sí, también hay centro Poom en Málaga, así que yo ya estoy planeando mi próxima escapada y pienso repetir hotel porque nos encantó el trato de su directora e hija del dueño de este y otros hoteles del grupo MS de la Costa del Sol, Lorea, un nombre precioso que significa Flor en vasco; porque mujeres del mundo, no hace falta que nos compren flores como dice Miley Cyrus, pero siempre nos gustan los gestos galantes, y a mí un malagueño guapo me prometió unas “loquitas”, unas tortas deliciosas de hojaldre típicas de la ciudad, y espero que cumpla.