Árbol genealógico
Encuentran un singular parentesco entre Gabriel Attal y Felipe VI
Tirando del hilo del tiempo, el primer ministro francés podría tener sangre azul, bastante diluida, por cierto
Inevitablemente, el primer ministro francés, Gabriel Attal, va a seguir copando titulares y obligando a un dispendio inusitado de tinta. Por juventud, méritos o también por el encanto que desprende. A sus 34 años se ha convertido en el primer ministro más joven de la quinta república. Sus mechones canos ya fueron centro de atención en las redes sociales el verano pasado durante su discurso como nuevo ministro de Educación. "¿Soy yo quien tiene canas desde ayer?", abrió hilo un usuario a través de su cuenta de X. Otro advirtió que podría tratarse de una sutil estrategia para echarse algún año encima y añadir seriedad al cargo. Pura especulación.
La semana pasada se llevó una buena reprimenda cuando fue sorprendido por Boris Vallaud, líder del Partido Socialista, mirando el teléfono mientras él hablaba en la tribuna. El enfado fue mayúsculo al comprobar que lo que compartía, entre risas, con las ministras Prisca Thevenot, Marie Lebec y Rachida Dati, eran las imágenes de un simpático chow chow negro. "La próxima vez que le haga una pregunta, ladraré y me rascaré las orejas con los pies".
Como no hay dos sin tres, esta semana vuelve a llamar la atención por el parentesco con el rey Carlos III de Inglaterra y nuestro monarca, Felipe VI. Tan lejano que habría que retroceder casi cuatro siglos. Ha sido la web Royal Stories la que, rastreando el árbol genealógico de Attal, ha encontrado cierta sangre real en sus venas por sus vínculos familiares con las monarquías de Francia y Navarra. De acuerdo con esto, sería, entre otros, primo lejano del rey Harald V de Noruega, del rey Felipe VI de España e incluso del soberano de Carlos III.
El vínculo vendría por vía paterna. El político es hijo de Yves, abogado y productor de cine, y bisnieto de Élie, un tunecino que se casó con una italiana de la familia del pintor Modigliani. Su madre, Marie de Couriss, descendía de una familia de "rusos blancos", término que designa a los monárquicos rusos. El padre de Marie de Couriss y abuelo de Attal era hijo de la baronesa María de Meyendorff, descendiente a su vez de la princesa Daria Galitzine (1761-1828) y del príncipe Mikhail Mikhailovich Galitzine, gran embajador en Persia.
En el árbol genealógico de Mikhail Mikhailovich Galitzine se encontraría Ivan Bariatinsky, marido de la princesa Catalina de Schleswig-Holstein-Sonderbourg-Beck. Según Royal Histories, la familia de este último habría reinado en Dinamarca, Grecia y Reino Unido. De ahí vendría esta complicada e improbable conexión con seis monarcas actuales: Federico X de Dinamarca, Harald V de Noruega, Felipe de Bélgica, el gran duque Enrique de Luxemburgo, Felipe VI de España y Carlos III del Reino Unido.
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