Todo sobre Ernesto Sevilla y Joaquín Reyes: de sus trabajos soñados a su anécdota más escatológica

La nomofobia es definida por la Fundéu como el miedo a estar incomunicado sin móvil. Se prevé que para finales de 2025 haya más de 15 mil millones de teléfonos en todo el mundo, una cifra que parece decidida a doblar a la de habitantes del planeta Tierra. La globalización de nuestra sociedad y la continua conexión con gente de otros países han creado una dependencia constante de nuestros dispositivos.

En 'Sin Cobertura', uno de los estrenos más esperados del verano, la pequeña Rita pide un deseo mientras se encuentra de vacaciones en el pueblo con su familia: que los teléfonos móviles desaparezcan. Cuando todo el mundo se dispone a volver a casa, una niebla misteriosa envuelve a la familia y los manda a un destino de lo más inesperado: la Edad Media. Aunque con sus más y sus menos, el deseo de Rita se ha cumplido.

Dos de los protagonistas de 'Sin Cobertura', Ernesto Sevilla y Joaquín Reyes, no han necesitado teléfonos móviles para consagrar una amistad que se extiende a través de las décadas. Oriundos de Albacete, este dúo de cómicos lleva años provocando risas allá donde van. Aprovechando su visita a 'El Hormiguero', hemos querido ahondar un poco más en esta curiosa relación.

Su amistad abarca generaciones

Tras conocerse debido a la amistad entre sus padres, tanto Sevilla como Reyes pasaron por la Universidad de Bellas Artes de Cuenca. Sin embargo, coincidieron poco durante sus estudios, ya que se llevan cuatro años de diferencia. Ambos vienen de familia de maestros: los padres de Joaquín y su abuelo eran profesores.

En el caso de Ernesto, también había varios docentes en su familia. Su padre, por ejemplo, aprobó la oposición de inspector de educación con apenas 25 años, en 1967 ya se había instalado en Albacete y empezó a trabajar mano a mano con profesores. En 2016, colaboró en un sketch de su hijo en El Hormiguero.

Sus trabajos soñados y sus colaboraciones en televisión

De pequeño, Joaquín quería ser ilustrador, pasión que terminó consiguiendo, ya que hoy sigue dibujando. Además, ha publicado varios libros, como 'Ellos mismos' y 'Realidad de piedra'. Ernesto, sin embargo, no ha hecho realidad su sueño de infancia: quería ser albañil porque le daban envidia unos trabajadores que fueron a hacer unas remodelaciones a su casa.

Han trabajado juntos en cinco formatos de televisión: 'Anclados', 'Retorno a Lilifor', 'Museo Coconut', 'Muchachada Nui' y 'La Hora Chanante'. A su vez, han participado juntos en películas como 'Spanish Movie'.

En 2018, los cómicos se encargaron de presentar la 32ª edición de los Premios Goya. Aunque su humor recibió críticas considerando a esta entrega como 'la peor gala de los Goya', ambos lo tomaron con deportividad. Sevilla aseguró haberle hecho ilusión "presentar los peores Goya de la historia", mientras que Reyes confesó creer que las bromas "habían encajado".

La confianza da asco

Hace ya muchos años, mientras el dúo de cómicos actuaba en la sala Galileo de Madrid, Joaquín tuvo unas terribles ganas de ir al baño. Como no quería salir de la sala para hacer sus necesidades, decidió orinar en una botella de cerveza.

El espectáculo continuó como tal, y podría haberse quedado en una noche más, sin ninguna sorpresa... de no haber sido por las ganas que le entraron a Ernesto de beber cerveza. Así pues, cuando Sevilla entró en su camerino, lo primero que hizo fue beber de cierta botella. Tras pegarle un trago, al actor le supo raro su contenido, y el resto ya es historia.