«Hay voluntad de ayudar a España»

MARSELLA- Cinco bilaterales y un encuentro informal con Berlusconi, que confirmaron fuentes del PP. Rajoy fue uno de los líderes más buscados en Marsella por aquello de que en dos semanas se estrenará como presidente de un Gobierno de España que cuenta con la mayoría absoluta que le han otorgado las urnas y que tendrá que someter al examen de Bruselas sus reformas y su compromiso de cumplir el déficit.
Además de con Sarkozy y Merkel, el político español también se reunió con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, por cierto, la entrevista más larga, de hora y media. Y con el primer ministro polaco, Donald Tusk, y con el primer ministro finlandés, Jyrki Katainen. El interés, sin duda, estaba en su conversación con Merkel y Sarkozy, por las necesidades nuestras de financiación y por la necesidad de ellos de obtener apoyos para su propuesta de refundar Europa por la vía del ajuste presupuestario y las sanciones para los que no cumplan las reglas. Al término de las reuniones, fuentes oficiales de la delegación española informaron de que Rajoy les había explicado las líneas generales de su programa, sin entrar al detalle, por ejemplo, de los ajustes que hará en los Presupuestos porque aún no tiene todos los datos de la contabilidad nacional. Es decir, según el PP, les dijo que el gran objetivo de España es la creación de empleo y la reactivación económica, y que para eso su Gobierno cumplirá con los objetivos de déficit, culminará la reestructuración financiera y aprobará un paquete de reformas estructurales, entre ellas la laboral. En relación a los bancos y las entidades financieras, las citadas fuentes precisaron que, como mucho en tres meses, Rajoy tomará una decisión sobre el «banco malo» para adquirir los activos tóxicos que le reclaman desde el sector bancario, y ratificaron que, en cualquier caso, reforzará los controles y la supervisión sobre las entidades financieras.

El líder del PP también trasladó a Merkel y Sarkozy su apoyo al grueso de su propuesta, con sus matices. Y ante ellos defendió que España tiene voluntad de participar, de opinar y de estar en todas las decisiones. Ni Merkel ni Sarkozy pidieron concreciones sobre sus planes, es decir, si va a subir impuestos, de dónde va a recortar o sobre su agenda. Sobre su receptividad ante las propuestas de Rajoy, las fuentes oficiales indicaron que hay «voluntad» de ayudar a España.

«No tengo alternativa»
Por otra parte, Antena 3 publicó unas imágenes de la bilateral de Rajoy con Barroso, de los «mudos» (grabación al principio de las reuniones), en las que el español confiesa que no tiene alternativa al estricto plan de reducción del gasto público. Palabras que se enmarcan en el encuentro que el miércoles mantuvo con el secretario de Estado del Tesoro de EE UU y al debate sobre si la contención del gasto está llevando a Europa a una recesión que preocupa a Obama.

LA LUPA
España quiere mandar en el fondo de rescate
Rajoy defendió un papel clave de España en el futuro de la UE. El futuro presidente pidió que España pueda, junto a Alemania, Francia e Italia, bloquear el Mecanismo Europeo de Estabilidad (ESM). Según el PP, Rajoy realizó una petición expresa a Zapatero para que la traslade hoy al Consejo Europeo. Se trata de que la cuota mínima en el BCE con la que se pueda bloquear el antiguo fondo de rescate (ahora ESM), se reduzca del 15 al 10 por ciento. Así, España, que tiene una cuota del 11,9, también podría bloquear este fondo.