Interior

«Spray» de pimienta para los lanceros

La polémica fiesta del Toro de la Vega se vio sacudida ayer por la irrupción de una activista antitaurina, que roció con «spray» pimienta a los asistentes, así como a la patrulla de la Guardia Civil que la detuvo. La tradición, que cada año congrega a cientos de personas en la localidad vallisoletana de Tordesillas para tratar de dar muerte a lanzadas a un toro bravo, levanta en cada edición una enorme controversia entre partidarios y detractores.

Cientos de personas persiguieron y lancearon al toro hasta acabar con su vida
Cientos de personas persiguieron y lancearon al toro hasta acabar con su vidalarazon

En esta ocasión ha tenido un desenlace inesperado: un toro muerto, una mujer detenida, diecisiete heridos por inhalación tóxica y otro por asta de toro. Estas cifras convirtieron al festejo de ayer en uno de los más agitados de cuantos se recuerdan.

Los hechos sucedieron poco después del comienzo del torneo, cuando R. L. S., de 46 años y residente en El Escorial (Madrid), se introdujo en el recorrido provista de una mochila con gas pimienta y comenzó a rociar a caballistas y lanceros a pie, que respondieron intentando agredir a la mujer. En ese momento intervino una patrulla de la Guardia Civil cuyos integrantes, a pesar de que fueron alcanzados por el aerosol lacrimógeno, lograron evitar el linchamiento de la activista, que no obstante sufrió varios golpes y lesiones. Tras su detención, los agentes comprobaron que tenía en su poder otros seis botes de «spray» pimienta de medio litro cada uno, un líquido que se proyecta en forma de aerosol y que habitualmente se utiliza como medio de defensa personal, así como para disolver disturbios.

Por el momento, se ignora si la mujer –está acusada de un delito de lesiones, desorden público y atentado contra agentes de la autoridad– actuaba a título particular o si, por el contrario, formaba parte de una estrategia elaborada por grupos contrarios a la celebración de este espectáculo. No obstante, Silvia Barquero, portavoz del Partido Animalista Contra el Maltrato Animal (Pacma), que ayer se manifestó en el centro de Madrid para pedir la erradicación de este evento, rechazó categóricamente que la detenida forme parte del partido o tenga ninguna relación con él, y pidió la eliminación de una tradición que considera «obsoleta y sanguinaria». Para Barquero, el Toro de la Vega «exporta al exterior una imagen negativa y medieval» de España «que nos perjudica».