El mercado bendice el pacto pero el riesgo persiste

El proceso de limpieza emprendido por el gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero también contó con el respaldo de la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's (S&P). La firma decidió mantener el rating de la deuda soberana española, situado en «AA» a largo plazo y en «A-1+» a corto, por las reformas estructurales y la consolidación presupuestaria. Sin embargo, la compañía norteamericana no oculta su preocupación por la reestructuración del modelo de negocio de las cajas de ahorros, por lo que no descarta un posible recorte de nota de solvencia. Por esa razón, la perspectiva de España sigue siendo «negativa» a ojos de los analistas de S&P.

Con este contexto macro, y con el euro y el petróleo en zona de máximos –1,38 dólares la moneda única y 102 dólares el barril de Brent, respectivamente–, el Ibex 35 registró una subida del 1,5% y se situó más cerca del nivel psicológico de los 11.000 puntos perdido a mediados de abril del año pasado. Favorecido, además, por las buenas noticias macroeconómicas conocidas ayer a ambos lados del Atlántico y por el imparable avance de Wall Street, el selectivo prolongó el rally comprador iniciado a principios de año apoyado en los grandes bancos y las constructoras.

Optimismo generalizado
Cuatro de los cinco grandes valores del parqué nacional batieron la revalorización del Ibex liderados por BBVA, que registró un avance del 3,79%. Santander también escaló por encima de los nueve euros por título, aunque la variación porcentual se quedó en el 2,04%. Repsol e Iberdrola ganaron un 2,24% y un 1,65%, respectivamente, en una sesión en la que Acciona fue la compañía más alcista con un repunte del 4,29%.

El optimismo se trasladó al mercado secundario, y el riesgo de invertir en España –medido como el diferencial del interés del bono español con el alemán a diez años– se situó por debajo de los 200 puntos básicos (menos del 2%). Sin embargo, la rentabilidad de la deuda española sigue por encima del 5%, y la reducción de la percepción del riesgo país tiene mucho que ver con el encarecimiento del «bund» germano.

En cualquier caso, la prima de riesgo del país no estaba tan baja desde el pasado 16 de noviembre, justo antes del rescate de Irlanda, y favorecerá la financiación del Estado en los mercados. No en vano, el Tesoro tiene previsto colocar esta semana entre 3.000 y 4.000 millones de euros en bonos a tres y cinco años.