Autodefinido de fin de semana

Les quiero presentar un nuevo estilo de entretenimiento de fin de semana, que, además, puede servir de guión para que Almodóvar vuelva a sus mejores y desenfadados tiempos. Si usted se pone a ver los programas de alguna cadena, el melodrama lo tiene servido. Por ello, yo les voy a contar la historia y ustedes ponen los nombres de los personajes. Se dice que una conocida periodista …............. que se ha cambiado de cadena .............. tuvo relación, siempre presuntamente, con una famosa modelo …......... que estuvo en «el candelabro». Se insinúa que también tuvo más que una amistad con una conocida vedette ............ que siempre guarda para algún momento glorioso contar si estuvo o no estuvo con una altísima personalidad. Más adelante se habla de la misma vedette, y se insinúa que en un Rocío compartió casa con una conocida cantaora. Para rematar la faena, el sobrino ......... de la cantaora …......, entra en liza, afirmando que el que tuvo fandango con la vedette fue él, porque aunque tenía 17 años era un tío muy echado «pa'lante» y con mucha dotación, tanto que se podría haber usado de tranca para la puerta de la casa rociera. La tía muy enfadada entra por teléfono en el programa para afirmar que en su casa nunca hay tejemanejes. De refilón, se habla de una reina de la copla …........... y de una fallecida locutora ............., ya sólo queda que la citadísima vedette intervenga para contar, sin decir nada, si tuvo una buena «amistad» con la tía, con el sobrino, con Alain Delon o con ese importantísimo personaje. Aquí lo único que hace falta es que alguien se líe con la prima de riesgo y la meta en cintura antes de que nos arruine a todos. A mí el romance que de verdad me interesa es el del recién llegado Guti y la guapísima Romina, que alegran las mañanas de Antena 3.