Educación alega ante la protesta que destina 21 millones a becas para tasas

Valencia- Ante estas protestas , la Conselleria de Educación esgrimió que destina este año 2,1 millones de euros para becas para la exención del pago de tasas universitarias, lo que supone un incremento del 10 por ciento respecto a la partida presupuestaria del año anterior.

En este sentido, explicaron que desde 2001 se han concedido 25,9 millones en estas ayudas, que han beneficiado a un total de 41.432 alumnos universitarios. La Conselleria argumenta que la subida de las tasas se justifica «en la necesidad de igualar el precio de los estudios oficiales universitarios con el precio aprobado en otras Comunidades autónomas».

Según la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas, la Comunitat Valenciana tiene el precio de crédito matriculado más barato de España con 9,91 euros de media.

Las tasas para el curso 2011-12 han aumentado un 7,5 por ciento para la primera matrícula, un 75 para los repetidores y un 120 por ciento para los que se matriculan por tercera vez. Esos aumentos, según Educación, se aprobaron en consenso con los equipos rectorales de las universidades públicas valencianas y, para las primeras matrículas, suponen una subida de entre 50,6 y 77,3 euros al año. En términos cuantitativos, la subida para alumnos repetidores es de 12 euros más respecto a la primera matrícula y de 7 euros más sobre el crédito matriculado para aquel estudiante que se matricule por tercera vez.

Sin embargo, para los estudiantes con las subidas de las tasas, «cada vez es más caro estudiar». Una de las integrantes de la Asamblea Interuniversitaria defendía que «cualquier persona tiene derecho a acceder a una educación pública» y con esta política «los que no puedan permitírselo, no podrán estudiar».
 

El CIPF cuelga el cartel de «Se vende»
Investigadores del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) de Valencia guardaron ayer un minuto de silencio en protesta por los recortes de la Generalitat en un acto en el que colgaron crespones negros en sus instalaciones, que lucen un cartel con el lema «Se vende». La protesta se celebró justo cuando termina el periodo de negociaciones del expediente de regulación de empleo propuesto por la dirección del centro, que afecta a 108 trabajadores y supone cerrar catorce laboratorios y dieciséis líneas de investigación. Los sindicatos harán públicos hoy los acuerdos parciales alcanzados entre el comité de empresa y la dirección del CIPF.