Gestha rechaza una nueva subida de IVA y pide cambios en el IRPF y Sociedades

En concreto, Gestha apuesta por limitar el uso del dinero en efectivo para que las facturas de más de 1.000 euros pagadas total o parcialmente en metálico, con cheques bancarios o documentos al portador no sean deducibles en el IRPF, el Impuesto de Sociedades e IVA (tal como hizo Grecia y ahora Italia).

Asimismo, propone elaborar estudios oficiales detallados sobre la economía sumergida y optimizar los recursos de la Agencia Tributaria y obtener de forma automática información de carácter mercantil o tributario de las personas y empresas que operen en los territorios calificados como paraísos fiscales. Estas medidas reducirían la economía sumergida en diez puntos y aportarían 38.500 millones de euros al año.

Por otro lado, se inclina por replantear el IRPF para eliminar las ganancias patrimoniales especulativas de la tributación como rentas del ahorro, restringir el uso del sistema de módulos y elevar el tipo de gravamen hasta el 24%. Con estas medidas, las arcas contarían con casi 1.380 millones de euros anuales adicionales.

De la misma forma, propone replantear el Impuesto de Sociedades y crear un nuevo tipo para las grandes empresas (las que facturan más de 45 millones) que eleve del 30% al 35% el gravamen aplicable a los beneficios a partir del millón de euros. Los cambios en Sociedades aportarían más de 13.900 millones de euros al año.

Por otro lado, asegura que otras alternativas a estas medidas serían crear un impuesto sobre la riqueza, situar el devengo del IVA en pymes y autónomos en el momento del cobro parcial o total de la factura o establecer un impuesto a las transacciones financieras internacionales. Esta última medida podría aportar unos 400.000 millones en todo el mundo.

Así, Gestha rechaza nuevas subidas de IVA, aunque apuesta por mejorar su rendimiento recaudatorio para mejorar los ingresos y reducir el déficit, ya que España es uno de los países de la UE que menor recaudación extrae de este impuesto por cada 100 euros de consumo.

Según Gestha, esto debería lograrse a través de la lucha contra la evasión fiscal, pero en ningún caso incrementando los tipos del IVA, pues ello derivará en una contracción del consumo que no sólo atenuará su poder recaudatorio, sino que afectará con mayor intensidad a las personas con bajos ingresos.