País Vasco
Bufones mediadores
El cuerpo me pide reclamar que al abogado Currin y sus colaboradores los expulsen de España. Es evidente que no se puede hacer, pero es un desahogo ante la irrupción de unos «mediadores» que no pintan nada en este tema. Currin es un «profesional» al que le interesa la politización de un conflicto inexistente. Una vez más, la foto del cuarteto nos dice mucho. Un grupo de desocupados, que desconocen la realidad vasca e irrumpen como un elefante en una cacharrería para darnos unas lecciones que no necesitamos. No hay nada que normalizar en el País Vasco, salvo la rendición incondicional de un grupo de delincuentes. La mediación es una bufonada. Un sarcasmo cruel para los miles de españoles que han sufrido la barbarie terrorista. Un insulto a una sociedad que se ha mantenido firme frente a ETA. Currin y sus colegas no pintan nada. No hacen otra cosa que favorecer a los terroristas. El Gobierno debería dejar muy claro que pierden el tiempo y que no recibirán ni un solo euro. Y que se queden en sus casas.
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