Valencia

Las mujeres sobreviven más al melanoma porque lo detectan antes

Ellas suelen estar más pendientes de las alteraciones de su piel

Los médicos aconsejan evitar la exposición al sol entre el mediodía y las cuatro de la tarde y usar cremas protectoras
Los médicos aconsejan evitar la exposición al sol entre el mediodía y las cuatro de la tarde y usar cremas protectoraslarazon

Valencia- La supervivencia en los casos de melanoma está en torno al 86 por ciento a los cinco años del diagnóstico para ambos sexos, si bien las mujeres presentan mayores índices de sobrevivir a la enfermedad. Esta mayor supervivencia en las mujeres parece responder al hecho de que ellas suelen realizar un mayor control y supervisión de sus lesiones cutáneas. Además, ejercen también como cuidadoras de las lesiones cutáneas del resto de los integrantes del núcleo familiar, siendo habitual que sean ellas las que alerten de posibles melanomas en miembros del resto de la familia.

Según explican desde el Servicio de Dermatología del hospital La Fe de Valencia, las posibilidades de curación del melanoma son mayores si se diagnostica en fases tempranas, y además presenta la peculiaridad de ser un tipo de tumoración accesible y visible. Por ello, subrayan la necesidad de controlar en casa los cambios que se puedan percibir en los lunares (color, extensión, volumen, picor o sangrado). Si se detecta algún cambio, es conveniente que el paciente acuda a su médico de cabecera, que será quien lo derive al especialista.

El Servicio de Dermatología de La Fe de Valencia registró 35 nuevos pacientes con melanoma durante 2011, a consecuencia, principalmente, de una exposición inadecuada al sol.

Y es que el melanoma cutáneo es la forma más peligrosa del cáncer de piel, ya que si bien los tumores cutáneos se curan en su mayor parte, el melanoma es el que causa un mayor número de muertes (supone 75 por ciento de las muertes por cáncer cutáneo).

Dentro de los factores que predisponen al desarrollo de este tipo de tumor destaca fundamentalmente la exposición solar, especialmente cuando son intermitentes, muy intensas y causan quemaduras. Además, entre el ocho y el diez por ciento de pacientes con melanoma tiene antecedentes en su familia con este enfermedad.

Cien lunares
Este Servicio, dirigido por el doctor y profesor titular de la Universitat de València Rafael Botella, insiste en que lo peligroso son las quemaduras solares, ya que las radiaciones alteran el ADN de las células de forma acumulativa, provocando la aparición de melanomas.

Esta capacidad de la piel para acumular las lesiones provocadas por el sol es lo que lleva a los expertos a asegurar que «la piel tiene memoria» y a insistir en la necesidad de protegerse frente a sus efectos desde pequeños.

Se trata de tumores que se pueden prevenir, por lo que Botella aconseja protegerse con cremas de factor 30 como mínimo y aplicarla diez minutos antes de la exposición repitiendo cada dos o tres horas.

Asimismo, conviene evitar la exposición al sol entre el mediodía y las cuatro de la tarde. De igual modo, recuerda que la población en la que se debe extremar especialmente el cuidado ante las quemaduras solares son los niños pequeños y las personas con pelo y ojos claros, así como el que ya haya tenido algún melanoma, o que tenga hermanos, padres o hijos que lo hayan padecido. También aquellas personas que tienen más de cien lunares deben controlarse de forma regular por su dermatólogo.

Las zonas donde los melanomas aparecen más frecuentemente son el tronco y las piernas. Pese a ello, Botella insiste en la necesidad de proteger del sol toda la piel de forma homogénea. «No solo luchamos contra el melanoma, existen otros tipos de tumores menos agresivos que el melanoma, pero que aparecen con mucha mayor frecuencia, que suelen localizarse en zonas con daño solar crónico, como la cara o el cuero cabelludo de personas que ya han perdido el cabello».


Investigar las causas de la desaparición
La Fe investiga los mecanismos inmunológicos que provocan la regresión del melanoma en algunos pacientes. En el tratamiento del melanoma, la respuesta inmunológica del paciente es muy importante para su curación. «Con cierta frecuencia, encontramos melanomas en los que una parte de ellos ha desaparecido de manera espontánea. Este mecanismo se conoce como regresión. Conocer cómo se activa y funciona este mecanismo de regresión puede ayudarnos a encontrar nuevos tratamientos para el melanoma en un futuro», explica el doctor Botella.