Lujo y espacio reunidos en un mismo concepto de utilidad

MADRID- Lograr que un vehículo pensado para acoger con comodidad a una familia numerosa combine utilidad y belleza no es tarea fácil. Los familiares han sido siempre los precursores de los monovolúmenes, y aunque han conseguido ser una moda en países como Alemania, Italia, Suecia o Noruega, diseñar un vehículo del tipo familiar de cuatro metros y medio de largo que pudiera alojar cinco pasajeros era como «alargar» una berlina, subirle el techo y poco más.

Audi, uno de los precursores de este tipo de automóviles, vuelve a sorprender en la séptima generación del A-6 Avant con un puro familiar, pero en el que sus líneas le acercan al estilo de un cupé y su interior a un turismo de alta representación. Un logro que se ha conseguido trabajando con el objetivo de dotar a este nuevo modelo, en el mercado desde el pasado año, con las ventajas estéticas de un turismo y la capacidad de un monovolumen. Y todo ello envuelto en un aire de deportividad que enamora con sólo verlo.

El A6 Avant no ha perdido sus dimensiones, pero ahora su peso es inferior y por ello consume menos. Si su aspecto exterior es atractivo y su interior elegante, donde radica su mayor secreto es en su carrocería, construida con materiales ligeros, como el aluminio, lo que le permite unas prestaciones dinámicas más cercanas a un deportivo que a un turismo clásico.

Y, muy a tener en cuenta también, la parte mecánica a la que se le ha dotado de unas motorizaciones que no sólo elevan sus prestaciones, gracias a su menor peso, sino también consiguen minimizar sus consumos, un argumento definitivo para los usuarios de este segmento tan especial.

Cinco motores de inyección directa conforman la gama del A6 Avant: dos de gasolina y tres del tipo diésel, que van desde los 177 a los 300 caballos. A estos motores se les acoplan dos tipos de cajas de transmisión: manuales de seis velocidades y automática secuencial. Con dos programas de funcionamiento: del tipo Stronic, para los más deportivos, y Triptonic para los más viajeros, que dispondrán de ocho velocidades. Aunque opcional, el sistema neumático de suspensiones, denominado «Adaptive Air», le imprime al vehículo un nivel de prestaciones y de comodidad elevado.

Su amplio habitáculo, en el más puro estilo Audi, aporta una capacidad más que suficiente para cinco personas y un no menos generoso maletero de 565 litros de volumen de carga útil.
Su comportamiento en carretera es el de un turismo. Su tren delantero ha recibido ciertos retoques deportivos que permiten que te olvides de que estás conduciendo un familiar. Es ágil, maniobrable, pese a su longitud de casi cinco metros, y divertido para el conductor, a la vez que confortable para los pasajeros. Entre los entretenimientos incluye un paquete de extras electrónicos, como la posibilidad de conexión a internet, que entretiene en los viajes por largos que sean. Está disponible en los concesionarios desde un precio base de 41.750 euros.