Alfonso Alonso: «Rajoy es la garantía de que no habrá concesiones a ETA por la paz»

–Al final el PP se ha quedado solo defendiendo que Amaiur no tenga grupo propio.
–A mí me gustaría que no estuvieran en las instituciones, pero están. Ésa es la realidad. Y la realidad es que no sólo están aquí, sino que si hubieran obtenido el porcentaje suficiente tendrían grupo. No lo tienen porque su resultado electoral no se lo permite. Las reglas existen y se aplican, y no merecen un trato distinto al de los demás.

–Como portavoz del PP, ¿mantendrá una interlocución normal con los diputados de la coalición abertzale?
–En el País Vasco nos conocemos todos. Los ciudadanos tienen que saber que sus siete diputados no son iguales. Está Rafael Larreina, que pertenece a EA, y que tiene una trayectoria democrática intachable, se esté o no de acuerdo con sus ideas. También hay un representante de Aralar, que es una plataforma que surgió de ese mundo y que fue valiente en desmarcarse de él y en convertirse en punta de lanza del mensaje de que la vía de ETA había dejado de tener sentido. Pero hay otros cinco diputados que proceden del mundo duro de la antigua Batasuna y que tienen una acreditada trayectoria de defensa de ETA. No todos son iguales, pero la mayoría viene de donde viene. Por tanto, lecciones de democracia no nos pueden dar, y lo razonable es que seamos muy exigentes y muy vigilantes.

–Entonces, ¿usted hablará con ellos o no?
–Nuestra prioridad es la recuperación económica y la defensa del interés general. No vamos a perder el tiempo en discutir cuestiones que no vayan en esa dirección. No vamos a sentarnos a hablar sobre cómo algunos quieren romper España o sobre los beneficios que algunos quieren para los condenados por terrorismo. Evidentemente, no tiene sentido que nos pongamos a hablar con los representantes de Amaiur sobre cómo quieren suprimir la autonomía foral de Navarra o sobre el derecho de autodeterminación.

–Y es difícil que quieran hablar de otra cosa con ustedes.
–Entonces, la cuestión que me preguntaba ya está contestada. Con nosotros no tienen nada que rascar.

–Cambiando de tercio, visto el nuevo Congreso, ¿cree de verdad que podrán llegar a acuerdos con IU, con UPyD, incluso si me apura con el PSOE, cuando empiecen a enviar sus proyectos reformistas y sus iniciativas económicas al Parlamento?
–Todos debemos sentir la responsabilidad del momento que atravesamos y actuar teniendo en cuenta qué está pasando en España y qué problemas hay en la calle. Esta responsabilidad es la que nos debe llevar a buscar la centralidad y el espacio de entendimiento. Por nuestra parte, tenemos un compromiso firme de utilizar el diálogo como instrumento para hacer política. Pero claro, los acuerdos no dependen solo de nosotros. Y nuestra obligación también es marcar la iniciativa, afrontar los problemas y una vez ofrecido el acuerdo, si éste no es posible, tomar las decisiones oportunas.

–¿Con CiU como socio preferente?
–Nosotros nunca hemos utilizado este término, pero queremos tener una buena relación con CiU y también creemos que hay cuestiones que tienen que formar parte del acuerdo entre los dos principales partidos.

–Inevitablemente, el hecho de que el primer contacto del señor Rajoy con los grupos de la oposición sea con CiU es interpretado como toda una declaración de intenciones.
–El PP va a cuidar la relación parlamentaria con CiU, pero vuelvo a repetir que en los grandes asuntos de Estado buscaremos el acuerdo con el PSOE.

–¿Los ciudadanos tienen que asumir que el Estado de Bienestar que conocían desapareció?
–No, precisamente el compromiso del PP es poner en marcha las políticas necesarias para salvar al Estado del Bienestar. Su base es que cuando uno se jubila, después de haber estado cotizando gran parte de su vida, tenga una pensión; o que las personas mayores sin recursos puedan ser atendidas por el Estado; o que quien pierde un empleo tenga una ayuda para volver a encontrar otro; o que cuando uno esté enfermo, reciba la mejor asistencia sanitaria. Eso es la vida. Si queremos salvar lo esencial hay que establecer prioridades en la utilización de los recursos y activar con urgencia la recuperación de la actividad económica. Ya vale del discurso demagógico que plantea que sólo a la izquierda le preocupa el Estado de Bienestar. Los hechos demuestran que no es verdad.

–¿«Priorizar» quiere decir que tiene que erradicarse la cultura del gratis total incluso para algunos servicios públicos?
–No hay nada gratis porque todo lo pagan los ciudadanos con sus impuestos. Como responsables públicos tenemos que decidir quién paga qué y de qué manera, y hay que hacerlo sin perder de vista la idea de la justicia en el reparto de las cargas. El PSOE no afrontó la crisis con un criterio de justicia y nosotros no vamos a cometer el mismo error. La gestión socialista también ha dejado en evidencia que cuando las cosas van mal y no se cuidan los fondos públicos, el dinero acaba sacándose del bolsillo de los ciudadanos porque se les sube los impuestos y se les recortan las prestaciones a las que tienen derecho. Ése no es nuestro modelo.

COMPROMISO CON LAS PENSIONES
–¿Rajoy revalorizará en enero las pensiones, como prometió en campaña? ¿Y no rebajará más el sueldo a los funcionarios? –Nuestro compromiso es actualizar las pensiones, que es cumplir con el espíritu y la letra del Pacto de Toledo, y, desde luego, tampoco perjudicaremos más a aquellos que están en situación más vulnerable. Y en cuanto a los funcionarios, ya se les bajó el sueldo, ahora mismo lo tienen congelado y la idea es no bajarlo más.