Reestructuración bancaria

El «banco malo» gestionará 90000 millones en activos

El real decreto que creará la Sareb se aprobará el 16 de noviembre. Los traspasos se realizarán con descuentos mínimos del 45%

Madrid- El «banco malo», que absorberá los activos inmobiliarios tóxicos del sector financiero tendrá un balance máximo de entre 85.000 y 90.000 millones de euros, aunque el montante final se conocerá cuando se determine el valor de los activos que serán traspasados desde los bancos.

 Se llamará Sociedad de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria, Sareb. Se aprobará el 16 de noviembre próximo, tendrá una duración del 15 años y el sector público (el FROB) será minoritario en el capital. El Gobierno guarda celosamente cuál será el descuento al que las entidades bancarias deberán traspasar los activos, aunque se da por supuesto que, en conjunto, rondará el 60% de su valor en libros. El ministro de Economía señaló en su momento que había que hacer atractiva la sociedad para que el capital privado pudiera tener la mayoría del capital y la mejor forma de hacerlo era vía precio.

En vigor, el 19 de noviembre
El real decreto por el que se establece el régimen jurídico de las sociedades de gestión de activos y de sus patrimonios separados será sometido a audiencia pública hasta el 25 de octubre próximo, para, posteriormente, pasar al dictamen del Consejo de Estado y ser aprobado definitivamente por el Consejo de Ministros. Desde esa fecha, 16 de noviembre, el Banco de España dispondrá de siete días para fijar el precio definitivo del traspaso de los activos.

En ningún caso, como reza el artículo 7 del texto, «podrá ser inferior a la cobertura que le corresponda en aplicación de las circulares dictadas por el Banco de España en materia de contabilidad de las entidades de crédito ni a la que pudiera ser de aplicación en virtud de lo dispuesto en el Real Decreto-ley 2/2012, de 3 de febrero, de saneamiento del sector financiero y en el Real Decreto ley 18/2012, de 11 de mayo, sobre saneamiento y venta de los activos inmobiliarios del sector financiero». Para el conjunto del sector inmobiliario, la segunda reforma de Luis de Guindos fijó las provisiones en el 45%.

No hundir el mercado
La mayor parte de los activos de la Sareb será suelo y promociones urbanísticas en sus distintas fases, «no viviendas». El real decreto deja abierta la posibilidad futura de incluir préstamos al consumo e hipotecas concedidas a particulares.

La cifra de 90.000 millones no será la definitiva. «Se trata de definir un colchón amplio» del tamaño que tendrá finalmente la sociedad. Inicialmente el capital estará en manos del FROB para que esté operativa a finales del mes de noviembre. Con posterioridad se irán incorporando los accionistas privados. La Sareb podrá distinguir la naturaleza de lo traspasado: bienes inmuebles, bienes muebles, derechos de crédito, participaciones societarias o activos inmateriales.

Economía está convencido de que la creación de la Sareb no tiene como objetivo el hundimiento del mercado inmobiliario, «pero el precio de traspaso debe ser lo suficientemente atractivo para que el sector privado lo vea interesante para invertir».
Los bancos nacionalizados y los que vayan a recibir ayudas pública estarán obligados a traspasar sus activos. El resto lo hará de forma voluntaria.

Hecho para ganar dinero
Economía y Hacienda coinciden en negar la denominación de «banco malo» a la sociedad de gestión de activos inmobiliarios, oficialmente bautizada ya como Sareb. «Ni es un banco ni tiene por qué ser malo». De hecho, el Ministerio que dirige Luis de Guindos no tiene en sus planes que la sociedad entre en pérdidas. Puede que en su despegue las haya, pero habrá beneficios en los siguientes años, sobre todo en la segunda mitad de los 15 años de vida que le dan a la sociedad.