Inflación

ANÁLISIS: Economía juega todas sus cartas a reducir el déficit

La Razón
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- ¿Qué lectura puede hacerse del nuevo escenario macroeconómico dibujado por el Gobierno?
–Habrá que esperar algunas semanas para conocer los datos sobre el comportamiento de la economía en estos primeros meses, pero todo apunta a que, una vez más, el Gobierno ha pecado de optimista. Las nuevas previsiones que realiza el Ministerio de Economía siguen estando alejadas de las cifras que manejan el banco de España, la OCDE o el FMI.

- ¿Qué va a jugar en contra de la economía española?
–El precio del petróleo, pero, sobre todo, los tipos de interés si, como se espera, el BCE decide subir el precio del dinero. Ambos factores van limitar el poder adquisitivo de las familias y, por lo tanto, frenar el consumo interno, sobre el que tradicionalmente se ha basado el crecimiento del PIB español.

- ¿Se puede hablar de optimismo incluso tras rebajar el crecimiento en los dos próximos años y elevar las previsiones de paro?
–Sí. Casi nadie piensa que el PIB pueda crecer este año por encima del 1%, pero el Gobierno ha mantenido su previsión del 1,3% y ha rebajado los datos para 2012 y 2013 en unas décimas. En cuanto al desempleo, todo el mundo sitúa la tasa de paro por encima del 20%. Si el PIB no crece mucho más no habrá forma de generar puestos de trabajo.

- ¿Ha tirado el Gobierno la toalla en materia de empleo?
–La verdadera obsesión del Gobierno está ahora en el cumplimiento de los objetivos de déficit, más que en combatir el paro. Sabe que en los próximos meses, simplemente por razones estacionales, el número de desempleados se va a reducir mes a mes, hasta septiembre. Y sabe que los mercados están más pendientes de las cuentas públicas. Por eso no ha revisado su compromiso de reducir el déficit hasta el 6% este año y hasta el 3% en 2013. En eso se juega su escasa credibilidad.