Bernanke el libertador

Se repite la historia, una vez más ha sido la inflación la que ha prendido
la mecha de una gran guerra o revolución. La libertad se abre camino en el mundo árabe y quizá quepa atribuir parte del mérito al presidente de la Reserva Federal. El empeño de Ben Bernanke por devaluar el valor del dinero y forzar al ahorro hacia activos físicos, ha resultado como era de esperar, en una espiral inflacionista en ciertos ámbitos de la economía, agravada ahora por los acontecimientos en el mundo árabe. Un avance de la libertad sin duda producirá beneficios duraderos en el largo plazo, pero en el más inmediato, las tensiones en el mundo árabe pueden generar perniciosos efectos sobre la actividad económica global. El primero de ellos ya lo estamos notando, el precio del petróleo sube a niveles sólo antes alcanzados en 2008, previos al desencadenamiento de la crisis económica y financiera. El aumento del petróleo por encima de los 100 dólares tiene un impacto en la economía real, disminuye la renta disponible para las familias, incrementa los costes para empresas en múltiples sectores y mina la confianza de inversores, disminuyendo el apetito por el riesgo y disuadiendo la inversión. Veremos si esta tensión es algo transitorio o solo el principio, pero hay quien ya especula con posibles subidas de tipos, posibilidad que considero remotísima en Europa, pero que de producirse sería la muerte de la recuperación económica y la certificación de que nos encontraríamos en el indeseable escenario de la estanflación. Menos mal que el Gobierno español está encima de todo, y con gran visión estratégica ha reducido el límite de velocidad de 120 a 110Km/h.