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Griñán juega a ser Rubalcaba mientras Andalucía alcanza el récord de paro

Atribuye el desempleo a la reforma laboral, pero obvia que otras regiones crean trabajo

Griñán, con dos de sus más estrechos colaboradores, Susana Díaz y Mario Jiménez
Griñán, con dos de sus más estrechos colaboradores, Susana Díaz y Mario Jiménezlarazon

SEVILLA- ¿Por qué otras comunidades, como por ejemplo Galicia, son capaces de crear empleo, y Andalucía, con una estructura productiva similar, lo destruye? Tras los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que han colocado a Andalucía en una situación límite –con una tasa de paro del 35,42–, la respuesta de José Antonio Griñán ha sido culpar a la reforma laboral de Rajoy y a la política de ajustes en el gasto público. El presidente andaluz sigue ganando terreno en la política nacional y ayer, en una entrevista en la Cadena Ser, no descartó incluso optar a liderar al PSOE. Sobre una futura sucesión de Rubalcaba, aseguró que «nunca sabe lo que va a hacer hasta que llegue el momento. Pero en este momento mi apoyo es a la actual Ejecutiva», dijo.

El presidente de la Junta y presidente del PSOE lleva tiempo queriendo marcar la agenda política a su partido. Tras la derrota de Patxi López en las pasadas elecciones vascas, es el socialista con más poder de España. Y quiere hacerse notar. Sus relaciones con Rubalcaba son tensas. El proyecto de Griñán para su partido era otro –el encabezado por Carme Chacón–. El problema es que su deseo de convertir a la Junta de Andalucía «en el espejo de los progresistas de España» –así lo aseguró el portavoz de su Ejecutivo el pasado martes– se da de bruces con datos como el de la EPA.

El diferencial de paro con respecto a la media nacional siempre ha sido desfavorable para Andalucía. A mediados de 2007, en pleno desarrollo económico, la tasa de paro nacional se situó por debajo del 8 por ciento. En Andalucía, era del 12. Cuatro puntos de diferencia que, a día de hoy son de más de diez puntos –35,52 en la región, por 25,02 en el resto de España–.
En el tercer trimestre de este año, en Andalucía 61.300 personas se han incorporado al paro. La región aporta 3 de cada 4 nuevos parados al conjunto nacional. En Madrid sí hubo creación de empleo (15.100 personas); Galicia (11.900); y Castilla-La Mancha (9.600). En el mismo contexto económico, en otras comunidades la sangría del desempleo se contiene mejor.
Cada trimestre, la Junta justificaba ese diferencial por el incremento de la población activa. Cada vez había más gente que se incorporaba al mercado laboral, lo que «desdibujaba» la realidad. Ese argumento no cuadra. Los datos muestran que el incremento de la población activa andaluza fue muy moderado en el tercer trimestre (2.900 personas, un 0,07 por ciento); en un año ha sido de 35.600 (el 0,89%).

Ni tan siquiera la reforma laboral está afectando de una manera distintiva a Andalucía –«está facilitando mucho la destrucción de empleo ya que han aumentado los expedientes de regulación de empleo en un 55 por ciento en Andalucía», argumentó Griñán–. Los datos de trabajadores afectados por ERE autorizados en la región no son, de lejos, los más elevados. Hasta agosto, 15.080 empleados se han visto afectados por un ERE en la comunidad. En Aragón 19.930; en Asturias, 16.219; 26.854 en Castilla La Mancha; 58.469 en Cataluña; en Valencia, 33.445; 35.571 en el País Vasco; 18,590 en Galicia; o 30.849 en Madrid.

Ante las dificultades para explicar los malos datos de la evolución del empleo, Griñán apuntó más arriba y apostó por «reflexionar sobre lo que está pasando en Europa y las actitudes del Gobierno alemán y del Banco Central Europeo, que parecía que iba mejorando pero está siendo frenado por las decisiones de la canciller Merkel».

Y ante este panorama, ¿qué puede hacer la Junta de Andalucía para mostrar esa alternativa económica que traslada siempre el bipartito? Ante un altavoz nacional, Griñán reconoció lo que niega su Ejecutivo aquí: que el margen es muy pequeño. «Sin dinero público es imposible hacer nada y con un presupuesto contractivo que reduce el gasto público las cosas que se pueden hacer son muy pequeñas», concluyó.

"Creo que es mucho mejor estimular la economía desde los elementos que en el futuro van a potenciar la creación de empleo, de manera que cuando salgamos de la crisis lo hagamos con la economía bien ordenada y para eso es importante que las empresas sigan invirtiendo en innovación, investigación, desarrollo, calidad y en internacionalizar sus productos", ha destacado el jefe del Ejecutivo andaluz, que ha admitido que estos son "elementos de futuro, pero no de presente, y ahora lo que hay que hacer sobre todo es ayudar a las personas que están en desempleo".r