Bruselas

Bruselas empeorará las previsiones de déficit público para España

España no va a cumplir con el objetivo del déficit para este año, fijado en un 6% del PIB. Más aún, probablemente empeorará la última previsión del pasado mes de mayo, cuando la Comisión Europea predijo que se quedaría en un 6,3% del PIB, por lo que deberá tomar nuevas medidas para corregir el desfase frente a Bruselas.

El primer ministro polaco, Donal Tusk, ayer junto al presidente del Consejo Europeo, Van Rompuy, en Bruselas
El primer ministro polaco, Donal Tusk, ayer junto al presidente del Consejo Europeo, Van Rompuy, en Bruselaslarazon

Éste es el principal mensaje con el que se encontrará el Gobierno saliente socialista, o el entrante del PP, según pronostican las encuestas, una vez se conozcan las perspectivas financieras de otoño, que presentará la Comisión este jueves. Estarán presididas por la «ralentización del crecimiento económico» en la eurozona pero también en otras zonas del mundo, como explica un portavoz comunitario a LA RAZÓN.

España no será una excepción. Por ello, aunque las mismas fuentes consideran «prematuro» adelantar si se exigirá a España nuevas medidas, lo sugieren al señalar que nuestro país «tendrá ingresos inferiores, por lo tanto tendrá que optar por aumentar los ingresos o reducir los gastos». Es decir, más medidas de austeridad o subidas de impuestos, sin saber de momento hasta qué punto la recuperación del Patrimonio podría servir para cumplir.

Agujero regional
Aunque de momento no se sabe por cuántas décimas se alejará España de su hoja de ruta para reducir el déficit tras el impacto de la crisis, fijado en un 6% para este año y un 4,4% en 2012, para volver en 2013 por debajo del 3% que limita el Pacto de Estabilidad Europeo, Bruselas ve en el agujero regional parte importante del problema. Según señala un informe de los servicios económicos de la Comisión sobre las Finanzas Públicas, hecho público ayer, «las regiones suponen una gran parte del gasto público total, y nueve de las 17 excedieron sus objetivos fiscales en 2010».

El aviso de Bruselas llega pocos días después de que se conociera que las comunidades alcanzaron durante el primer semestre del año el 1,2% del PIB de déficit, muy cerca del 1,3% fijado como límite para todo el año por el Gobierno central, con el fin poder cumplir con sus objetivos.

Por ello, la Comisión Europea recomendó ayer a España que controle el déficit y la deuda de sus comunidades autónomas. Bruselas advirtió también que España es uno de los países de la UE donde más ha aumentado la deuda pública (del 36,1% en 2007 al 71% previsto para 2012, es decir, 34,9 puntos) y corregir la situación costará «muchos años» pese a los esfuerzos de ajuste fiscal. «Para algunos países, como Grecia, Irlanda, Portugal, Reino Unido y España, el gran incremento en el nivel de deuda durante la crisis significa que la reducción en 2014 será escasa y que revertir los aumentos vistos desde la crisis costará probablemente muchos años más», asegura el Ejecutivo comunitario en un informe sobre la situación de las finanzas públicas de la UE.

«Esfuerzo exigente»
De hecho, para reducir su nivel de deuda y situarlo por debajo del umbral del 60% del PIB que exige el Pacto de Estabilidad, España deberá hacer un esfuerzo de consolidación «particularmente exigente» superior a 6 puntos porcentuales del PIB entre 2011 y 2020, según Bruselas.

Sólo Irlanda, Grecia, Reino Unido, Letonia y Portugal han experimentado aumentos de su deuda pública superiores al de España durante la crisis, según los datos del informe. En el conjunto de la UE, el nivel de deuda ha aumentado 24,3 puntos y alcanzará el 83,3% del PIB en 2012 mientras que en la eurozona el incremento es de 22,3 puntos, hasta el 88,7% del PIB. El Ejecutivo comunitario ha alertado de que «una mayor deuda es costosa en términos de pago de intereses», informa Efe.


Europa del Este quiere más voz
Los países de la Europa central y del este que aún no forman parte de la zona euro se unieron ayer para hacer oír su voz en las negociaciones para reformar las estructuras de la unión monetaria y advirtieron contra una división de la Unión en dos «clubes», según apuntó el primer ministro polaco, Donald Tusk. Los ministros de Asuntos Europeos de siete Estados comunitarios (Polonia, República Checa, Hungría, Bulgaria, Rumanía, Lituania y Letonia) se reunieron ayer en Bruselas para tratar de hacer un frente común en este sentido. Todos ellos, al igual que el resto de países europeos excepto Reino Unido y Dinamarca, tienen la obligación de unirse al euro una vez que cumplan con los criterios de convergencia, según los tratados de adhesión a la UE.