Elecciones generales

Efecto retardado

La Razón
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La supuesta financiación irregular a través del triángulo Palau-Ferrovial-CDC puede tener unos efectos devastadores para la federación nacionalista, aunque retardados en el tiempo.
Si aquello que parece, efectivamente lo es, Artur Mas tendrá un problema mayor que el actual.
Hasta ahora sólo ha comprado tiempo al precio de perder su autoridad moral y política para combatir la corrupción. Tratando de evitar un peligroso deterioro de sus expectativas electorales a corto, hoy ya está perdiendo credibilidad.
En lugar de despistar debería mostrarse intolerante con todo, y con todos, los que se aprovecharon del dinero público para beneficio propio o partidario. Debería investigar y apartar de su lado a los implicados. Si lo hiciera ahora, evitaría tener que asumir las consecuencias políticas, después.
Ahora bien, llegará tarde si actúa después que finalmente la coincidencia entre personas, empresas, entidades, cantidades y fechas aparecidas en las investigaciones judiciales, tributarias y parlamentarias se demuestre que no era una extraña casualidad.
En ese momento, con las elecciones realizadas, los efectos serán devastadores para él y su partido e injustos con Catalunya. O es que acaso –tan equivocado como Berlusconi– cree que los resultados electorales lo borrarán todo.