España

Lo que cuestan los «ni-nis»: 15735 millones al año

España pierde el 1,47% del PIB por los jóvenes que ni estudian ni trabajan

Lo que cuestan los «ni-nis»: 15.735 millones al año
Lo que cuestan los «ni-nis»: 15.735 millones al añolarazon

madrid- Aunque España es uno de los países desarrollados que más invierte en Educación –unos 50.000 millones de euros anuales–, la triste realidad es que en la actualidad existe toda una generación perdida de jóvenes. Bien sea por culpa de la falta de oportunidades, bien sea por la falta de ganas para buscarlas, lo cierto es que buena parte de una de las «hornadas» mejor preparadas de la historia española está en su casa mano sobre mano. Son los llamados «ni-nis», que ni estudian ni trabajan, y que son ya uno de cada cinco jóvenes de entre 15 y 29 años. El problema, aparte del innegable desperdicio de talento –donde lo haya–, es que todo esto tiene un coste económico para España, que además es elevadísimo: 15.735 millones de euros el pasado año, o lo que es lo mismo, el 1,47 por ciento del Producto Interior Bruto. Desde 2008 este gasto se ha incrementado un 45,7 por ciento, y los «ni-nis» son ya 1,64 millones de personas. Traducido a cifras más terrenales, cada uno de estos jóvenes nos cuesta 11.375 euros anuales. Para efectuar este cálculo se han tenido en cuenta parámetros como el coste en prestaciones por desempleo, el dinero que el Estado deja de ingresar en impuestos, la ausencia de consumo por parte de estas personas o su incapacidad para aportar a la hucha de las pensiones, entre otros.

 Según la agencia Eurofound, especializada en analizar las condiciones de vida y de trabajo del Viejo Continente, el perfil de estas personas en nuestro país no es ni mucho menos el de un iletrado que no ha cogido un libro en su vida, aunque el nivel formativo influye bastante. Se trata de un varón, desmotivado por la falta de oportunidades para encontrar un empleo, que tiene ya experiencia laboral y con preparación académica. La recesión ha golpeado con fuerza a este colectivo, no sólo en España, sino también a nivel europeo. De hecho, sólo uno de cada tres jóvenes tenía trabajo el año pasado, según datos de Eurostat.

El ejemplo holandés
Cuantitativamente, el problema de los «ni-nis» en la Unión Europea tiene nombres y apellidos: 153.013 millones de euros y 14 millones de personas que ni estudian ni trabajan –el 15,4 por ciento de los jóvenes de entre 15 y 29 años–, y que conducen al desaprovechamiento del 1,21 por ciento del PIB europeo. Por países, España (21,1% de «ni-nis») ocupa el quinto lugar del ranking comunitario, sólo superada por Bulgaria (24,6%), Grecia (23,2%), Italia (22,7%) e Irlanda (22%). En las antípodas de estos países se encuentra Holanda, que presenta el mejor dato de la UE, con sólo un 5,5 por ciento de «ni-nis».
 

 

No sólo una cuestión educativa
Convertirse en un «ni-ni» no es sólo una cuestión de no querer dar ni palo al agua. Aunque la Educación es una de las claves –los jóvenes sin formación tienen tres veces más probabilidades de convertirse en «ni-nis»–, también influyen otra serie de factores externos. Formar parte de hogares con ingresos bajos, alejados de las ciudades, o donde los progenitores están divorciados o en paro, eleva el riesgo. Lo mismo sucede en el caso de los jóvenes inmigrantes (70% más de probabilidades) o de los que tienen discapacidad (40% más).