Toledo

El juicio llega ocho meses después del crimen de Seseña

El juicio que ha tenido lugar hoy en Toledo, en el que se ha puesto las penas máximas a las dos menores acusadas de la muerte de la niña Cristina Martín, de trece años, ha puesto fin a un proceso de ochos meses desde que apareció el cadáver de la niña, en un suceso que provocó una gran alarma social.

El 3 de abril de 2010 la Guardia Civil encontró el cadáver de Cristina Martín de la Sierra Motilla, una niña de 13 años que había desaparecido cuatro días antes en la localidad toledana de Seseña.

El cuerpo de la menor fue localizado con aparentes signos de violencia en una fosa cercana a una fábrica de yeso abandona de esa localidad y, en la misma jornada, una chica de 14 años de origen cubano, compañera del Instituto de la fallecida, fue detenida como presunta autora del crimen.

La autopsia reveló que Cristina Martín de la Sierra murió desangrada a causa de cortes en una de las muñecas, aunque el arma homicida no ha sido encontrada.

Según la investigación llevada a cabo, la víctima recibió una llamada de la detenida y, tras regresar de dar un paseo con su madre, le pidió permiso para salir a ver a una amiga a la que su familia no conocía.

Desde ese momento, las 11.00 horas del 30 de marzo, Cristina ya no volvió a ser vista con vida. Su padre, Francisco Martín de la Sierra, denunció la desaparición de la niña esa misma tarde.

El 5 de abril el juez de menores de Toledo ordenó el internamiento en un centro cerrado de la detenida, C.H.S., y posteriormente, otra menor, N.N.N., amiga de la autora del crimen, fue también internada por encubrimiento.

Según el relato de los hechos que hace la fiscalía de Toledo, tras una discusión en la antigua fábrica de yesos, la autora del crimen agarró "fuertemente"a la víctima "del cuello para asfixiarla, haciéndole caer al suelo, tras lo cual le propinó varios golpes en la cabeza con una piedra".

A consecuencia de los golpes recibidos, Cristina quedó inerte, momento que aprovechó la agresora para provocarle un profundo corte en la muñeca izquierda con una navaja y a continuación arrojó piedras y tierra sobre el cuerpo de la víctima, ausentándose del lugar.

La víctima quedó abandonada en estado de inconsciencia y murió desangrada en una agonía que pudo durar entre dos y tres días, según los datos de la autopsia que reveló la familia de Cristina Martín de la Sierra en junio.

El mismo día del crimen, la presunta autora le contó a una amiga como había matado a Cristina y, posteriormente, ambas acudieron al lugar donde yacía la menor.

La fiscalía y la acusación particular ha solicitado las penas máximas para las dos menores acusadas del crimen.

Otra menor fue acusada inicialmente de encubrimiento, solo por la acusación particular, pero el juez aceptó el sobreseimiento de la acusación a petición de la fiscalía.