Bruselas

Cuestión de Estado

La Razón
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Ya es 23 de mayo. Se conocen los resultados de las elecciones autonómicas y, a la espera de que se formen los nuevos Gobiernos en la mayor parte de las Comunidades, hay que plantearse seriamente mirar al futuro. Y ese futuro pasa necesariamente por preparar la posición que defenderá la delegación española en las negociaciones para reformar la PAC. La Comisión Europea tiene previsto presentar sus propuestas a finales de este año y, luego, en 2012, habrá que meterse de lleno en este proceso. El actual Gobierno no será, probablemente. Esta es la primera razón para que la posición que se consensue esté por encima de las contingencias y banderías políticas.

El segundo motivo es que estamos hablando, ni más ni menos, que de los 6.500-7.000 millones de euros que reciben cada año los agricultores y ganaderos españoles. Aunque es muy posible que esta cifra sufra algún tipo de recorte, también es verdad que seguirá siendo una suma muy importante. Se trata, por lo tanto, de una cuestión de Estado, y como tal debe abordarse por los responsables del Ministerio y de las Comunidades Autónomas. Hay que ponerse a la tarea de fijar la posición de conjunto que se defenderá en Bruselas, para adaptarla luego a las propuestas que presente la Comisión Europea. En mi opinión, el objetivo prioritario debe ser que retorne a España la mayor cantidad de dinero posible. A continuación, vendría la negociación «hispano-española» para repartir esa «pasta».