Ferias taurinas

Luto teñido de malva y oro

El mundo del toro y la afición de Madrid dan hoy su último adiós a Antoñete, su leyenda más cercana

Antoñete aguarda, pitillo en mano, pegado a tablas en Las Ventas
Antoñete aguarda, pitillo en mano, pegado a tablas en Las Ventaslarazon

MAdrid- Apenas han pasado 24 horas de su muerte. Apenas nos ha dado tiempo a tragar saliva. Apenas hemos podido recordar y volver a soñar el toreo con las imágenes de sus clamorosas faenas en Las Ventas. Antonio Chenel «Antoñete». Cinco puertas grandes, cinco. Imposible olvidar esa antología del clasicismo y la pureza engalanada con un inconfundible mechón blanco y un precioso envoltorio color malva. Lila y oro, así relucía su tauromaquia. Como su traje. El mismo que hoy presidirá la multitudinaria capilla ardiente con la que el mundo del toro le rendirá su último homenaje en Las Ventas. Su plaza. Su casa.

La cita es a las nueve en punto de la mañana. A esa hora, las puertas del coso venteño, cerrado a cal y canto durante toda la jornada de ayer para la puesta a punto y con sus tres banderas a media asta en señal de duelo, se abrirán para recibir a la gran familia del toreo. Compañeros, amigos, aficionados... todos presentes para compartir unos instantes con Antoñete. Para devolver todo lo que el genio madrileño les dio capote y muleta en mano. Para la ocasión, los responsables del coso –elegido a petición de su propia familia– han habilitado la sala Alcalá ante la imposibilidad de utilizar el aula cultural que lleva su nombre, ocupada estas semanas por la exposición «Toreador». Tampoco ha ayudado en exceso el inminente concierto fijado para el miércoles del grupo británico «Coldplay», puesto que sobre el ruedo ya han comenzado los preparativos para ubicar el escenario y el resto de la instalación necesaria.

El recinto preparado para despedir a Antoñete estará presidido por el féretro, escoltado con una fotografía a gran tamaño del diestro toreando y el traje de luces lila y oro que vistió en 1985, la tarde de su última salida a hombros en Madrid, pese a no cortar orejas. Dicho traje, presente en cientos de carteles y pinturas taurinas, había sido cedido con anterioridad por el propio torero al Museo Taurino de Las Ventas.

La capilla ardiente permanecerá abierta hasta las cuatro de la tarde para acompañar a los restos mortales del maestro que, posteriormente, será enterrado en el cementerio de La Almudena.