Rajoy a los sindicatos: «Los gritos no resuelven los problemas son injustos»

Córdoba- A menos de una semana para que comience oficialmente la campaña electoral –a las doce de la noche del viernes–, la maquinaria de los principales partidos está a pleno rendimiento. Se nota por la proliferación de actos y presencia en la calle, y también por el desembarco de los pesos pesados a nivel nacional. Ayer, Mariano Rajoy con Javier Arenas en el municipio cordobés de Lucena. Hoy seguirá el líder del PP y presidente del Gobierno la ruta en la provincia de Jaén y Rubalcaba acompañará a José Antonio Griñán en el primer acto multitudinario en la localidad granadina de Atarfe. No habrá respiro en la recta final para los comicios más disputados desde la Transición. La victoria del PP se da por segura, pero no tanto una mayoría de Gobierno.
Arenas participó por la mañana en un acto, en la capital cordobesa, organizado por la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO). Aseguró, en relación al ajuste del déficit propuesto por Rajoy para este año, que obligará a las autonomías a ahorrar 15.000 millones de euros, que se demuestra que «hoy tenemos un Gobierno que tiene crédito y que está recuperando la confianza de las instituciones europeas».
Por eso, el hecho de que el líder de la oposición, Alfredo Pérez Rubalcaba, haya apoyado esta medida –Rubalcaba ya apostó en la campaña de las generales por exigir a Europa una flexibilización del umbral del déficit– le pareció al presidente del PP-A positivo. «En estos momentos, es muy bueno cambiar las pancartas por responsabilidad, estoy convencido de que, de la crisis y del paro, o salimos todos juntos, o no salimos». «Hay algunos que dicen eso de vamos a hacer nuestro propio camino», en relación al eslogan de campaña de Griñán, cuando lo cierto es que «el camino lo tenemos que hacer juntos y que los momentos que estamos atravesando exigen un Gobierno que esté a la altura de las circunstancias, una oposición que esté a la altura de las circunstancias, unas organizaciones sociales que estén a la altura de las circunstancias y también que todas las administraciones públicas estén a la altura de las circunstancias, y no sólo el Gobierno de España».
En la misma línea, Rajoy defendió en el municipio cordobés de Lucena que, ante la crisis económica y financiera, «no se trata de dar gritos», sino de «hacer las cosas bien» y pensando siempre «en el interés general».
Para el presidente del PP «ahora hacen falta gobiernos que tengan convicción en lo que hacen, que se lo crean, que piensen que están tomando una decisión que a lo mejor no le gusta a mucha gente», pero que es la «que deben» tomar.
Quiso dejar claro que respetará «a todos» y que «si la gente quiere hacer manifestaciones, tienen derecho a hacerlo». Pero insistió en que los gritos «no resuelven los problemas». «Si quieren dar un paso más las organizaciones sindicales, pueden hacerlo, se lo permite la ley, pero sinceramente creo que no resuelve nada, que es injusto y no le ayuda a nadie», reiteró en el mitin que sirvió de pistoletazo de salida a la precampaña de las andaluzas, en apoyo de Arenas. Lo que sí «necesitamos», a juicio de Rajoy, es «serenidad y firmeza», como la que está mostrando el Gobierno que él preside, tomando decisiones, como las referidas al control del déficit público, porque eso es lo que permitirá que «en España y Andalucía haya una sanidad mejor, y mejor educación y pensiones» para lo que «tiene que haber gente trabajando que pague el impuesto de la renta».