Riad

El vicepresidente yemení convoca elecciones presidenciales en febrero de 2012

El vicepresidente del Yemen, Abdo Rabu Mansur Hadi, emitió hoy un decreto por el que convoca elecciones presidenciales para el 21 de febrero de 2012, anunció la televisión estatal.

Esta convocatoria tiene lugar apenas tres días después de que Ali Abdalá Saleh, hasta la fecha presidente de Yemen, firmase una iniciativa del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) para poner fin a la crisis que vive el país desde hace diez meses y que incluía la renuncia al poder que ejercía desde la reunificación en 1990.

El vicepresidente actuó conforme a las prerrogativas constitucionales que estipula dicho plan, que establece la celebración de elecciones presidenciales noventa días después de su firma. El pasado miércoles, Saleh suscribió la iniciativa en Riad junto con líderes de la oposición en respuesta a las amplias protestas que estallaron el pasado 27 de enero y que exigían su dimisión después de 33 años en el poder.

El plan, que fue elaborado por el CCG y auspiciado por Naciones Unidas, fija que el vicepresidente será el candidato único, de acuerdo al consenso alcanzado entre la oposición y el gobernante Partido del Congreso General Popular.

De esta forma, Mansur Hadi dirigirá durante dos años el proceso transitorio a lo largo del cual se enmendará la Constitución, se prepararán elecciones generales y se elegirán tanto un nuevo Parlamento como un nuevo presidente.

La oposición, por su parte, vaticinó que el vicepresidente emitirá otro decreto en las próximas horas en el que encargará a uno de los líderes opositores la formación de un gobierno de consenso nacional para administrar los asuntos del país durante esos dos años.

La firma del plan no supuso, sin embargo, el fin inmediato de la violencia y las protestas en el país, puesto que los manifestantes volvieron a salir a las calles en rechazo a las garantías de inmunidad que el plan del CCG concede a Saleh y a sus colaboradores.

Yemen, el país más pobre de la península Arábiga, vive una situación de crisis y de revuelta popular contra el régimen de Saleh, quien ha ejercido el poder desde la unificación entre el norte y el sur en 1990, aunque desde 1978 ya era el gobernante de Yemen del Norte.