Sevilla

Rubalcaba y Chacón arañan hasta el último voto

Se lanzan en un intenso cuerpo a cuerpo a la caza del delegado. La ex ministra «gana» terreno

Rubalcaba y Chacón arañan hasta el último voto
Rubalcaba y Chacón arañan hasta el último votolarazon

SEVILLA.- Nada está decidido. Un puñado de votos determinará el resultado de este incierto 38 Congreso Federal del PSOE. Lo dicen por aquí todos los expertos en recuento: «Quien diga que esto está hecho, miente». Cierto. Todo está abierto, y muy abierto, en «la fiesta de la democracia» que el socialismo celebra desde ayer en Sevilla. Se espera un resultado ajustado, nada de holguras en este pugilato que empezó con Alfredo Pèrez Rubalcaba como claro favorito y que según avanza parece que torna en favor de Carme Chacón., que ha ido de menos a más. Unos decían que la catalana ganaba ventaja por los errores del cántabro; otros, que porque dominaba la escena y la cámara mejor que su rival y la mayoría sólo porque «transmite voluntad de cambio frente a la resignación». Sea por lo que fuere, cada minuto que pasaba ayer, se extendía por el cónclave una apabullante sensación de victoria de la que fuera ministra de Defensa. La noche fue larga y cada uno recurrió a la persuasión, la presión o la convicción de todo compromisario que aún no tenía decidido el voto y del que si lo tenía era susceptible de cambiarlo.

Pero, sepan, que en esta política del marketing y la imagen donde cada detalle suma y donde cada gesto puede dar un voto, en el ágora del hotel Renacimiento había sensación de que Chacón ganaba terreno,. Y no porque los números cuadraran, sino porque la desatada euforia que mostraron los del equipo de la que fuera ministra de Defensa y el dominio de la escena apabullaron al contrario. Tanto que los colaboradores del cántabro, pese a insistir hasta la saciedad en que llevaban ventaja, parecían sin quererlo derrotados. Y es que la catalana, que no dejó de sonreir y saludar frente a un Rubalcaba serio y circunspecto, llegó a decir que se sentía como Messi «esquivando las patadas de Pepe». ¿Juego sucio? De todo ha habido en uno y otro bando. Dicen que desde llamadas a delegados a los que se llegó a intimidar de forma sibilina hasta amenazas directas. Hay cosas que no cambian.

¿Gana entonces Chacón?, se preguntarán. No, no hemos dicho eso. Tan sólo que se erigió como tal durante todo el día y que sus colaboradores parecían celebrar la victoria en cada rincón y en cada momento. Si por la mañana festejaban la fiesta con la que la delegación andaluza les recibió el día anterior, a mediodía hicieron una espectacular entrada en el comedor de los delegados. Escoltados por cuatro cámaras y con parada para el saludo y el abrazo en todas las mesas, menguaron con su actitud, a un Rubalcaba que había entrado minutos antes en el mismo recinto y nadie se había percatado. El uno no lo publicitó y entró con cara de circunstancias para sentarse en una mesa orillada, y a la otra le faltó hacer un directo para anunciar su entrada hasta el mismísimo y visible centro del salón.

Imagen de ganadora
La imagen de ganadora que logró trasladar durante todo el día obligó a los del bando contrario a improvisar en los pasillos una conversación informal con periodistas para trasladar que el recuento les daba ventaja considerable. Y añadían que además de la mayoría de delegados ya contados en algunas comunidades como Euskadi, o Castilla-La Mancha, se estaba produciendo un trasvase de votos de federaciones en las que supuestamente Chacón partía con ventaja como era el caso de Madrid, Valencia y Andalucía. En una cena de delegación, Tomás Gómez publicitó por fin su apoyo a la catalana, pero dió libertad de voto a su lista. ¿Sorpresas?

En la guerra de cifras no quiso entrar el sanedrín. Les bastaba el contagioso olor a victoria que desprendían por cada pasillo para notar que algunos delegados se apresuraban, aunque fuera de boquilla, a subirse al carro del ganador. Sus colaboradores sostuvieron, ya a última hora de la tarde, que tenían amarrada la victoria y que la primera jornada del Congreso había servido para certificar sus expectativas y calcular que su candidata vencerá a Rubalcaba por una diferencia de más de treinta. Todas las conversaciones con los delegados les hacían presagiar el triunfo. Aún así admitían que la intervención deante el plenario puede ser decisiva para decantar el voto. Tanto Chacón como Rubalcaba se lanzaron a la caza desesperada del voto del delegado, a un intenso cuerpo a cuerpo, señal de que ni uno ni otro las tienen todas consigo. Ya falta menos para saber el veredicto. Hoy más.


LA LUPA
Fría acogida a Felipe González

Minutos antes de que Zapatero comenzara a hablar, Felipe González hizo su entrada en el Plenario. Y a diferencia de otras veces, éste no se interrumpió para aclamara al otrora número uno. Dicen que su apoyo a Rubalcaba no ha gustado. Y, aunque no se le esperaba hasta mañana, pero acudió a escuchar a Zapatero, y sólo a eso. No le debió gustar mucho la intervención porque nada más acabar el ex presidente del Gobierno aplaudió exactamente cinco segundos y se marchó por dónde había venido, por una puerta lateral.