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El gran negocio de la infidelidad

Son webs que prometen aventuras discretas. En Inglaterra se han apuntado más de 600.000 personas y organizan fiestas para que se encuentren entre ellos. Los hombres pagan

Ellos y ellas. Ellas no pagan, mientras que ellos abonan 149,99 libras al mes por acceder a la base de contactos
Ellos y ellas. Ellas no pagan, mientras que ellos abonan 149,99 libras al mes por acceder a la base de contactoslarazon

Puede un «affaire» salvar una relación? ¿Qué importancia se le tiene que dar al sexo? ¿Está mal visto tener una aventura? ¿Está más aceptado socialmente dejar de tener relaciones sexuales con tu pareja cuando llevas mucho tiempo casado? Los romances fuera del matrimonio existen, otra cosa es que no se quiera hablar de ellos.

El tema siempre ha sido objeto de debate y aún hoy sigue levantando ampollas en determinados círculos si se trata sin tapujos. Pero Steven Wilson decidió abordarlo directamente en una cena entre amigos ante la mirada de su esposa. Corría el año 2003. El empresario tenía por entonces una web de contactos y, medio en broma medio en serio, una de las comensales le dijo que sería bueno conocer a alguien porque hacía años que no tenía relaciones con su marido, aunque lo de contactar por internet lo veía complicado y muy arriesgado. «¿Lo harías si la página web estuviera destinada sólo a personas casadas?», preguntó Wilson. «Sí, supongo que eso lo cambiaría todo». ¡Bingo!

Devon, donde más se engaña
El plan empezó a estructurarse rápidamente en su cabeza y montó IllicitEncounters.com, la primera web británica que ofrece aventuras sólo para personas que lleven el anillo que se pusieron tras el «sí, quiero». Actualmente, cuenta con 630.000 miembros. La cifra representa al 3 por ciento de los matrimonios británicos. Sólo este año se han apuntado 76.148 usuarios. El 45 por ciento son mujeres, muchas de ellas residentes en Devon, según la web, el condado de Inglaterra donde se dan más engaños. Por el contrario, Lancashire es el que cuenta con los matrimonios más felices.

La clave de la web es su discreción. «Muchas personas funcionan bien con sus parejas. Tienen complicidad y adoran a sus hijos. Se les ha acabado la pasión, pero prefieren dejar al sexo en un segundo lugar porque no quieren romper lo que tienen. En nuestra web saben que van a encontrar a hombres y mujeres que están en su misma situación y sencillamente no van a juzgarles por lo que hacen», explica a LA RAZÓN Rosie Freeman-Jones.

Nuestra «cita» tiene lugar en la City, uno de los lugares donde se encuentran muchos de los clientes de IllicitEncounters. Más de 40.000 ejecutivos y profesionales del mundo financiero mantienen en estos momentos una relación extramatrimonial. Son personas con ingresos anuales que rondan las 39.000 libras, es decir, 10.000 libras por encima del promedio nacional. «Son meticulosos y buscan la perfección en cada cosa que hacen. Cuando mantienen una aventura siguen las mismas pautas porque no quieren correr riesgos inútiles», dice.

La empresa no se entromete en las historias, pero sí recoge los comentarios que les dejan de forma anónima los usuarios. Y a veces hay sorpresas. «Recuerdo que un matrimonio se encontró en la web. No pusieron ni sus fotos, ni sus nombres reales, pero les llamó la atención el perfil de la otra persona. Cuando quedaron para conocerse no se lo podían creer. Nosotros pensamos que estaban hechos el uno para el otro. ¿Cómo si no se explican esas casualidades? Pero finalmente acabaron divorciándose», cuenta Rosie. Aun así, lo considera un caso aislado porque, según una encuesta que realizaron a 4.000 de sus miembros, el 86 por ciento afirmó que el «affaire» había sido positivo a su matrimonio. Sólo el 0,5 por ciento dijo que su relación había empeorado.

A pesar de la juventud de Rosie–sólo tiene 25 años–, la web la contrató hace tiempo como portavoz debido a la naturalidad con la que habla del tema. «Mi familia y mis amigos saben perfectamente a lo que me dedico. No tengo que ocultar nada. Creo que los que nos critican realmente lo hacen por el miedo o la envidia que sienten hacia nosotros por lo honestos que somos con el tema».

«¿Perdonarías en el futuro una aventura?». «No me lo he planteado, pero sin duda este trabajo me ha ayudado a saber más sobre las relaciones», contesta. Es cierto que los «tabúes» que se encuentra ahora para tratar el asunto no son los mismos que en 2003. El nombre de la web cada vez sale con más frecuencia en periódicos y programas de televisión, aunque el año pasado la empresa de publicidad que iba a anunciarles en los autobuses rechazó en el último momento su oferta. Consideraban que el producto era algo polémico, algo difícil de entender si se tiene en cuenta que en Navidad hay muchos hoteles que se anuncian en el metro de Londres como el «mejor sitio para acabar la noche si se te da bien la cena de empresa».

«Así es la sociedad británica –dice Rosie–, ahora exigimos mucho a la otra persona, tenemos reglas muy estrictas, pero el ser humano, por naturaleza, también es pasional y aventurero». ¿Sigue entonces existiendo el doble rasero? La respuesta es «sí». Prueba de ello es que el 42 por ciento de los miembros de la web son afines al Partido Conservador, el mismo que, este mes, ha aprobado una ley en Westminster para potenciar más la figura del matrimonio en los colegios.

Ellas, más aventureras
Con todo, según Rosie, no todo el mundo está preparado para tener un «affaire». «Hay personas que valen para ello y otras, sencillamente, no. La clave es controlar la aventura en todo momento», explica. En la práctica esto no es fácil y sobre todo son ellas las que se dan de baja al enamorarse de la otra persona. Por cada 3,5 hombres que son engañados por sus esposas, hay una mujer que es traicionada por su contrayente. Conclusión: son ellas las más «aventureras», pero también son ellas las que se plantean más seriamente el tema antes de tener su primera cita. Su perfil está muy definido: mujeres de entre 35 y 42 años, casadas desde hace cinco años y profesionales, en la mayoría de las ocasiones, del sector sanitario.

«Su manera de utilizar la web es totalmente distinta a las de los hombres. Normalmente pasan todo un día escribiendo su perfil mientras que ellos, en el 70 por ciento de los casos, ni lo terminan. Ellas buscan una persona que las entienda y las vuelva a hacer sentir atractivas. Muchas vienen muy inseguras y con poca autoestima. Ellos generalmente van más en busca de sexo. Pero nosotros queremos ser muy selectos y por eso a los hombres les hacemos pagar una mensualidad», explica Rosie. Mientras que las féminas pueden apuntarse a la web gratis, ellos tienen que pagar 149,99 libras al mes sólo por tener acceso a la base de contactos.

Son los propios usuarios los que organizan las citas, pero, por primera vez, el pasado mes de noviembre, IllicitEncounters.com montó una fiesta privada para que se sus miembros se pudieran conocer. «Les dimos máscaras y teníamos juegos preparados porque pensamos iban a ser vergonzosos. Pero fue todo lo contrario. La fiesta empezaba a las 7 y un cuarto de hora antes todos estaban ya deseando entrar. Fue un éxito total y pensamos repetirlo muy pronto». El sitio elegido fue una exclusiva champanería del sofisticado barrio de Soho. Ellos llevaban smoking. Ellas trajes largos de noche. La estampa recordaba mucho a «Eyes Wide Shut», película protagonizada por Nicole Kidman y Tom Cruise y centrada en el complejo mundo de las aventuras de la alta sociedad americana. Curiosamente, fue la última que rodaron como marido y mujer.

 

Una unión imposible con el fútbol
La web Ashley Madison, que dice contar con más de 11 millones de usuarios, lleva un tiempo intentando hacerse un hueco en España. Primero publicó un polémico anuncio y después ha querido (o dice que ha querido) patrocinar a varios equipos de fútbol de Primera División, ahora que casi todos tienen limpias su camiseta. Se habló del Sevilla y del Atlético de Madrid, pero fueron rumores que quedaron en nada.