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Balón de Oro

De Evaristo a McManaman

La memoria se queda en el gol de McManaman, el 0-2 en el partido de ida del Camp Nou la última vez que Real Madrid y Barcelona se enfrentaron en la Liga de Campeones. Pero ése fue sólo el penúltimo partido que disputaron Real Madrid y Barcelona en Europa.

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Era el año 2002, el Madrid «galáctico» estaba en el camino hacia la «Novena» y todavía quedaba un partido de vuelta en el Santiago Bernabéu que sirvió para poco. El Real había ganado en el Camp Nou en el partido de ida. 0-2 con goles de Zidane y de McManaman. Estaban tranquilos los madrileños ante la vuelta. Eran otros tiempos y el Madrid tenía la costumbre de triunfar en Europa los años pares.

Había ganado la Copa de Europa en 1998 y 2000 y aquel año Raúl acabaría levantando el trofeo en Glasgow después del gol de Zidane. El «7» marcó en la vuelta. 1-1 terminó el partido, pero lo más destacado se produjo antes del comienzo. ETA atentó en las cercanías del Bernabéu con un coche bomba que provocó 15 heridos y daños materiales.

Tres veces se han cruzado en Europa los dos grandes. Dos en semifinales y una en los octavos de final. Para los supersticiosos y los que creen en las estadísticas, predecir el resultado es complicado. Se han impuesto los dos de manera alterna, por lo que ahora le correspondería avanzar al Barcelona. Pero los azulgrana sólo consiguieron superar a su máximo rival en una eliminatoria de octavos de final. Cuando se enfrentaron en semifinales, como ahora, siempre ganó el Madrid. Y después, siempre ganó la Copa de Europa.

Las discusiones por los árbitros tampoco son nuevas. En 1960, la única vez que el Barcelona pudo con el Madrid en Europa, los protagonistas fueron Evaristo, autor del gol decisivo para el Barcelona, y Mr. Leafe, el árbitro inglés que dirigía el partido y que anuló cuatro goles al Real Madrid. En la ida, disputada en el Bernabéu, Mr. Ellis había dado validez al gol del empate azulgrana aunque Kocsis arrancó en fuera de juego.

Aquella era la primera derrota del Madrid en una eliminatoria europea. Un año antes, en semifinales, el Madrid de Di Stéfano fue imparable en su camino hacia la «Quinta». 3-1 y 1-3 ganaron los madridistas. Tres goles de Puskas, dos de Don Alfredo y uno de Gento certificaron el dominio madridista.