Medio centenar de dirigentes del PSOE de Málaga reclama un cambio de rumbo

MÁLAGA- El descontento y la presión en el seno del Partido Socialista es creciente. Destacados e históricos militantes del PSOE malagueño se reunieron ayer en la localidad de Álora para analizar el batacazo electoral del pasado 22-M y definir una hoja de ruta a partir de la cual intentar «redefinir» el discurso de cara a las próximas citas electorales. El objetivo es «rearmar» un partido «tocado y hundido», a cuya dirección provincial reclaman que depure responsabilidades.
Entre el medio centenar de dirigentes y ex dirigentes socialistas que secundaron la reunión en el conocido restaurante «Los Caballos», se dieron cita los ex presidentes de la Diputación de Málaga, José María Ruiz Povedano y Juan Fraile o el todavía mandatario de la institución, Salvador Pendón, así como el que fuera presidente de la comisión gestora que gobernó Marbella en 2006, Diego Martín Reyes, todos ellos sin responsabilidad pública ya en el recién iniciado mandato. Martín Reyes, secretario de la Ejecutiva municipal de Málaga, avanzó que este grupo de militantes solicitará a la dirección provincial del partido «que promueva la reflexión y se ponga al frente de ella» para a partir de entonces adoptar «las medidas más oportunas en orden a recuperar nuestros votos». En este punto advirtió de la urgencia de que la reflexión se produzca antes de la conferencia política anunciada la pasada semana por el secretario provincial del PSOE, Miguel Ángel Heredia, para el próximo otoño, al tiempo que incidió en que «esperar a después del verano es esperar mucho».
No obstante, quiso dejar claro que «no pretendemos ajustar cuentas» sino propiciar la «regeneración» de una situación adversa evidenciada en el «duro golpe» sufrido por un PSOE que dijo «no está K. O.»
Con respecto a quienes apuntan a la crisis económica como culpable en parte de los malos resultados cosechados en la última cita electoral quiso dejar claro que ha sido «un elemento importantísimo, pero no el único».
Por último consideró que el PSOE «debe abrirse a los militantes y al conjunto de la sociedad, ser más permeable, más accesible y seguir siendo un referente social como hemos sido siempre».
Tras un almuerzo en el citado establecimiento aloreño, el mismo en el que hace 16 años se reunieron militantes socialistas que abogaban entonces por un cambio de liderazgo en el PSOE malagueño, y que propició un aumento de poder del sector renovador en detrimento de los guerristas, dio comienzo el cónclave que se prolongó durante algo más de tres horas. A él, asistieron además de los referidos militantes la ex delegada de Asuntos Sociales Ana Paula Montero, la exconcejala del Ayuntamiento de Málaga Dolores Fernández y los actuales alcaldes de Almogía, Pizarra, Campillos y Villanueva del Trabuco, Cristóbal Torreblanca, Francisco Vargas, Jesús Galeote y Antonio Vegas, respectivamente, así como el parlamentario Mariano Ruiz Cuadra, el senador Manuel Arjona, el diputado provincial Cristóbal Guerrero y la diputada provincial y vicepresidenta en funciones de la Diputación Paloma Alonso, entre otros.