Córdoba

Bretón comió y salió al patio tras oír la noticia

Asegura por boca de su abogado que «es falso e imposible que los restos óseos sean los de sus hijos»

Bretón en la finca de Las Quemadillas, durante uno de los registros
Bretón en la finca de Las Quemadillas, durante uno de los registroslarazon

Madrid- Nada cambió ayer en la vida carcelaria de José Bretón tras escuchar, a través de los medios de comunicación, los dictámenes forenses que aseguran que los restos hallados en la hoguera que hizo en Las Quemadillas el 8 de octubre de 2011 eran los de sus propios hijos, desaparecidos hace once meses. Se mostró imperturbable durante todo el día. Comió el menú previsto e incluso salió al patio a dar un paseo. «Su comportamiento fue normal, como el de cualquier otro día», informaron fuentes consultadas por LA RAZÓN. Poco después decía por boca de su abogado, José María Sánchez de Puerta: «Es totalmente falso e imposible que los restos óseos sean de sus hijos».

Ayer, el único que seguía creyendo que Bretón era inocente era su abogado: «Dice la verdad y, si no la dice, de momento, no hay una prueba contundente que diga que José ha intervenido» en la desaparición de los niños, como una prueba de ADN. «Estoy sorprendido por este giro. En primer lugar, porque estos restos han sido analizados por la Policía Científica en dos ocasiones exhaustivamente y fueron categóricos al decir que éstos eran restos de animales, no de humanos. Así lo recoge el juez en todos y cada uno de los autos que ha dictado hasta este momento», sentenció.

Si finalmente la Policía ratifica el informe, Bretón pasaría de estar imputado por un delito de detención ilegal, a dos delitos por asesinato con premeditación y alevosía y agravante de parentesco.

Desde que José Bretón ingresara en la cárcel de Alcolea (Córdoba), se le ha venido aplicando el artículo 75.2 del reglamento penitenciario que establece limitaciones en el régimen que se le aplica y mayores medidas de protección. En definitiva, se trata de evitar que se mezcle con el resto de los internos para garantizar su integridad física por la tipología del delito que se le imputa, muy mal visto entre los otros presos.

Además, también se le aplica el protocolo de prevención de suicidios, lo que supone estar las 24 horas acompañado por otros presos de apoyo que son elegidos por la dirección del centro penitenciario.

Miguel Lorente, médico forense y profesor de Medicina Legal de la Universidad de Granada, cree que, de no haberse descubierto los restos, el mismo Bretón hubiera acabado confesando su autoría cuando ya lo hubiera dado todo por perdido, porque su intención es «hacer responsable a la madre de lo que ha pasado». «Su objetivo como maltratador es el sometimiento de su pareja y el daño para conseguir el control. Piensa que, en el fondo, ya ha perdido a sus hijos al haberse separado de su mujer y que quizás algún día puedan llamar papá a otro hombre».

Ayer el psiquiatra José Manuel Gaona definía a Bretón como un «psicópata egoísta e impermeable a los sentimientos». En su opinión, «es un tipo que no está alejado de la realidad, muy calculador e inteligente, con un perfil muy marcado por la ira y la frustración».

 

La Policía sugirió a la familia que pidiera otro informe
Con once meses de antelación podría haberse resuelto el caso de no ser por que un contundente informe de la Policía Científica concluía que los restos óseos hallados en la finca de Las Quemadillas pertenecían a animales. Eso fue lo que motivó que la Policía iniciara otras infructuosas líneas de investigación. Sin embargo, según fuentes de la familia de Ruth Ortiz, los mismos agentes animaron a la familia a que encargara por su cuenta otro análisis forense de los restos. El ministro del Interior ayer acabó diciendo que «hasta el mejor escribano comete un error». Ante la inisistencia de los periodistas, Fernández Díaz aseguro que «no se trata de acusar a nadie, sino de aclarar la verdad de los hechos. En todo caso, cuando un científico hace un informe, lo hace con su buena voluntad». El ministro insistió en que «no se deben adelantar acontecimientos ya que aún tienen que aclararse las contradicciones de los tres informes en poder del juez».