Jil Van Eyle: «Las microdonaciones sí funcionan bien»

–Ha puesto en marcha la idea de las microdonaciones (donar un euro al mes que se descuenta de la nómina) ¿Qué le inspiró?
–Pedir grandes cantidades no funciona. Euro a euro es más fácil.

–Una idea que ya practican más de mil empresas de 40 países...
–Sí, y más de la mitad, en España. Es una iniciativa que ya no controlo yo. Lo único que hago es difundir el «teaming», este sistema.

–Imagino que es fácil convencer a los trabajadores de que donen un euro...
–En las empresas donde hay «buen rollito» es más fácil. Esto va de abajo arriba: un empleado lo propone y el grupo acepta o no.

–Recaudan unos 200.000 euros mensuales y los dedican a fines sociales...
–Los donantes de cada empresa deciden a quién socorrer: puede ser un compañero necesitado o una ONG. Lo que quieran.

–Detrás de las historias de altruismo muchas veces hay una experiencia dolorosa...
–Mi hija Mónica, de 3 años, nació con hidrocefalia. Está sorda, casi ciega y su mente es la de un bebé. Pesa 7 kilos. Nació y cambió mi vida.

–¿En qué sentido?
–Tuve una empresa, gané mucho dinero, creía que la felicidad era tener un Porsche y viajar. Nació Mónica y cambié: conocí a gente que trabaja para ayudar a los demás. Supe enseguida que quería ser como esa gente.

–O sea, que para salir del lado oscuro siempre necesitamos que nos descabalgue un rayo, como a Pablo camino de Damasco...
–No sé los demás, pero en mi caso, Mónica fue mi despertador.

–Un despertador que le llevó a otros sueños...
–Sí, mi sueño ahora es ver el «teaming» en todo el mundo. A finales de octubre lanzaremos la plataforma de «teaming» on-line.

–Dígame como será...
–Será una red social para hacer microdonaciones y mejorar la vida de muchas personas de nuestro entorno.

–Una revolución, ¿no?
–Soy más partidario de la evolución. Cada día creo más en las personas
.
–En tiempos de crisis, ¿crece o decrece la generosidad?
–Crece, sin duda. Hay muchas ONG proponiendo el «teaming» para sobrevivir: sin subvenciones su situación es dramática.

–¿Es el «teaming» una forma moderna de caridad?
–De solidaridad. No es un invento nuevo: yo sólo lo he ajustado a estos tiempos.

–A ver si a la Merkel le sirve para el rescate de Grecia...