El PSC descarta plantar cara al PSOE con un grupo propio en el Congreso

BARCELONA– «Me gusta cuando callas porque estás como ausente».Como la musa de Pablo Neruda actuó Carme Chacón en su paso por el XII congreso del PSC. Sólo apareció en dos momentos, cuando el recién nombrado primer secretario, Pere Navarro, le dio un cariñoso abrazo, que constató su sintonía, y durante la negociación de la conveniencia de que los socialistas catalanes recuperen el grupo propio en Madrid.

Después de que José Bono pusiera en duda que se pudiera presidir el PSOE, cargo al que aspira Chacón, sin formar parte de él, tenía relevancia conocer el desenlace del debate sobre el grupo propio, un rifirrafe constante en los últimos congresos de los socialistas catalanes y que en esta ocasión volvía a estar presente. La pregunta que se esconde tras el grupo propio es qué objetivo tiene el PSC, gobernar Cataluña o ayudar al PSOE a gobernar España.

Debate intenso
Tras un debate «intenso», en palabras del alcalde de Sabadell, Manuel Bustos, la comisión bautizada como «¿Qué es y qué quiere ser el PSC?», descartó recuperar el grupo propio en el Congreso de los Diputados. Lo descartó sin que se llegara a votar la enmienda que lo defendía, motivo que provocó críticas entre los promotores de la misma.

La comisión sí votó otra enmienda promovida por Bustos y el alcalde de Lleida, Àngel Ros, que defiende la libertad de voto de los diputados del PSC en el Congreso cuando se debatan temas catalanes «esenciales». La enmienda Bustos-Ros, que ratifica el pacto federal que el PSOE y el PSC firmaron en 1977, salió adelante con el apoyo de 130 delegados y con 27 votos en contra.

Bustos descartó que reservarse el derecho a votar diferente en asuntos catalanes complique el camino a Chacón en su afán por liderar el PSOE.

El mínimo común denominador en torno al papel que el PSC debe interpretar en Madrid es la coherencia. No tenía sentido que el PSC no votara en Madrid el preámbulo del Estatut, un texto que propusieron en Cataluña, admitía Miquel Iceta, convencido de que esta contracción recibió un voto de castigo en las urnas.

Al margen de buscar un nuevo encaje para la relación entre el PSC y el PSOE, las comisiones pusieron los cimientos del nuevo proyecto con el sello de izquierdas y catalanista, capaz de echarle un pulso a las derechas –CiU y PP– en la próxima contienda electoral. Sin duda, es el reto más inmediato al que se enfrenta Pere Navarro y la nueva ejecutiva, que hoy se aprobará. Ser alternativa, pasa por recuperar la coherencia socialdemócrata, la credibilidad en Cataluña, reafirmar la autonomía como proyecto político y establecer una nueva alianza social con la sociedad civil.

PP y CiU piden un giro a los socialistas
barcelona- Tanto PP como CiU pidieron un giro a los socialistas, tras la designación de Pere Navarro . El portavoz parlamentario de los populares, Enric Millo, recetó a Navarro que abandone las «políticas erráticas» de los últimos años y afronte una nueva etapa con actitud constructiva con todos los partidos. También pidió al nuevo primer secretario del PSC que tenga una actitud «constructiva y positiva» para «con diálogo y sin utilizar la confrontación» facilitar la recuperación económica.

Por su parte, el secretario general adjunto de CDC, Oriol Pujol, invitó a Navarro a «pasar página» del tripartito y de la herencia económica y anímica que dejó a los catalanes. Josep Antoni Duran Lleida emplazó a los socialistas a dar un giro y abandonar «la cultura del no» a favor de una «colaboración leal» con el Govern.