Saura después de Saura

El único triunfador de las primarias socialistas el próximo 3 de octubre en la Región, se llama Pedro Saura. La candidata con mayores posibilidades a una semana de la votación, Begoña García Retegui, no es más que una excusa para que Saura pueda seguir manejando el PSRM-PSOE, aunque sea entre bambalinas. Será Saura, después de Saura, por eso se ha jugado sucio contra el otro candidato, el alcalde de Calasparra, Jesús Navarro. También en los municipios volverán a ganar los «sauristas» y lo que prometía ser una renovación en toda regla, sólo se quedará en más de lo mismo. Retegui era su portavoz en la Asamblea y nada indica que vaya a dejarlo, pues necesita esa tribuna para hacer llegar el ¿nuevo? mensaje a las bases del partido, mensaje que ya tendremos oportunidad de comprobar y que apenas variará sobre el ya conocido del hasta ahora secretario general. El próximo 3 de octubre, los socialistas murcianos habrán perdido la oportunidad de dar un salto adelante, pasar página y encarar el futuro. Pero no será así. La herida se hace cada vez más grande, como indica que dos de cada tres afiliados hayan decidido bajarse de ese barco. Es una pena, porque Murcia necesita una buena y sólida oposición, que esté en su sitio y que sepa criticar para construir una Región aún mejor. El gran error del PSRM-PSOE y de sus dirigentes ha sido atacar a Murcia para hundir a Valcárcel, y quienes se han hundido de verdad, son ellos. Retegui es corresponsable con Saura de ese deterioro de nuestra economía, y de poner a Murcia en los peores informativos y de no combatir el ninguneo general del Gobierno Zapatero. En este momento, no veo que la cosa vaya a cambiar para mejor, y mucho me temo que será al revés, es decir, continuarán los ataques suicidas al Gobierno regional para arañar un puñado de votos con el que maquillar la deriva de nuestro socialismo local. No se avanza destruyendo. No todo vale. Como no vale que todo se limite a un cambio de look de Retegui, ni que el cambio sólo consista en suavizar algunos de los mensajes o edulcorar ciertos contenidos. Murcia necesita otro socialismo, otro estilo, y aunque Navarro no da la talla suficiente para liderar el PSRM, sí al menos podría haber hecho de puente para que los socialistas cruzaran el río que les separa de la Murcia real. Las espadas están en alto. Esperemos que se imponga la cordura.