Más basura

Nunca pasa nada. En España hemos vivido casos de corrupción deportiva y nunca se han tomado medidas disciplinarias. Muchas veces hay gentes que se ríen de los problemas del fútbol italiano y olvidan que allí quien hace la paga. En Italia ha habido descensos a Segunda de clubes tan emblemáticos como el Milán. Aquí la Federación mira hacia otro lado y la Liga de Fútbol Pro- fesional, para disimular, silba.
Se ha destapado el escándalo del modo en que el Hércules ba- só su ascenso a Primera y no veo que se tomen medidas para cla- rificar el asunto. Claro que cualquier comisión federativa para asuntos de esta índole ya se sabe que termina en la nada. El juez que entiende del «caso Brugal», el de la concesión de la recogida de basuras de Alicante, se inhibe en lo deportivo porque aún no está en vigor en el Código Penal la estafa futbolística. Cuando los jueces puedan entrar de lleno en estos asuntos tal vez comprobaremos cómo las vergüenzas italianas no son distintas ni mayores que las españolas.
Es evidente que antes de condenar se debe conceder el beneficio de la duda. Sin embargo, ello no obsta para que en la Federación se pongan las pilas y estudien formalmente el asunto. En el fútbol español ha habido manipulaciones muchos años, aunque bien es cierto que menos de las que a veces se denuncian. Lo lamentable es que en los casos más flagrantes no se entre de lleno.
Esta vez el asunto es más sucio. Se trata del servicio de basuras.