Centros de Enseñanza
La proeza de la «vuelta al cole» en época de crisis
Las familias pagarán 820 euros por hijo, un 6,2% más que en 2009 / La subida del IVA provoca el encarecimiento de los libros de texto
Si se quieren ejemplos concretos de cómo la crisis afecta de lleno a las familias españolas, sólo hay que fijarse en los gastos que acarrean los más pequeños de la casa. La «vuelta al cole» de este año le va a costar a cada hogar una media de 820 euros por niño, lo que supone un incremento del 6,2 por ciento con respecto a 2009. Y eso contando que nuestro país todavía no ha abandonado el oscuro túnel de la recesión.
En realidad, la situación no deja de ser reflejo de una relación causa-efecto: el incremento del IVA en dos puntos, «unido a la constante subida del precio de los carburantes, ha dado lugar a un aumento del coste del regreso a las aulas que va a perjudicar aún más las maltrechas economías de miles de españoles». Así lo afirmó ayer Agustina Laguna, presidenta de la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI), que ha elaborado un estudio que constata el sacrificio que han de afrontar las familias.
Tomando como referencia cerca de 200 colegios de todo el territorio nacional, la FUCI estima que el gasto medio en un centro público es de 512 euros, 774 si se opta por uno concertado y 1.174 si es uno privado. De esta forma, la media estaría en torno a los 820 euros.
Poco IVA, más gasto
¿En qué se les va el dinero a los padres? Uno de los «clásicos» de estas fechas es el presupuesto destinado a los libros de texto. Según la FUCI, pese a que estas publicaciones «cuentan con un IVA superreducido», este año resultan un 3,8 por ciento más caras en comparación con 2009. Así, si el pasado año valían unos 183 euros, ahora no se adquieren por menos de 190.
Hay que sumar a este gasto el material escolar, como mochilas, cuadernos, carpetas, bolígrafos y demás útiles. En los centros públicos pueden suponer unos 50 euros por alumno, 120 en uno concertado y 125 en un colegio privado.
Varios cientos de euros se destinan también al uniforme y a la ropa de los niños. En los centros públicos se estima un gasto de 110 euros, la mitad que en el caso de los concertados. Mientras, en los privados se calcula que la media está en los 284 euros. Por otro lado, la comida costaría unos 160 euros en un centro privado, el doble que en uno público.No hay que olvidarse del transporte, un gasto que tendrán que afrontar aquellos padres que no puedan permitirse llevar y recoger a sus hijos. Serían alrededor de 115 euros mensuales.
La FUCI alerta también a los padres de gastos que, en principio, no estaban previstos. Es el caso de la matrícula, uno «de los epígrafes que más encarece el regreso a las aulas». Si bien la federación recuerda que en centros públicos y concertados su «coste es cero», también avisan de que algunos colegios concertados «disfrazan este concepto llamándolo gastos de inicio de curso», lo que incluye la «secretaría, informatización, gestión, sobre de matrícula, comunicaciones» y demás. Resumiendo: el concepto de matrícula no suele bajar, al final, de los 200 euros.
Los padres pueden intentar que la sangría de euros sea menos violenta. Desde la FUCI recuerdan a los progenitores que pueden «solicitar las becas estatales que cada año concede el Ministerio de Educación para la adquisición de libros de texto y material».
Del mismo modo, la federación recomienda «informarse de las becas de comedor y transporte que facilitan» las comunidades autónomas; aprovechar «los descuentos que permite la ley en libros de Primaria y Secundaria u optar por comprarlos de segunda mano»; reutilizar y/o reciclar «la ropa, calzado, libros y materiales de otros años que estén en buen estado»; evitar el «marquismo», es decir, la compra de primeras marcas, lo que puede suponer un ahorro del 30 por ciento, y huir, «en la medida de lo posible», de los créditos rápidos, ya que a la larga «aumentaría el sobreendeudamiento».
No en vano, en ocasiones son decisiones erróneas las que «engordan» las facturas. Así lo cree la Asociación General de Consumidores (Asgeco), que recomienda a las familias «no dejarse llevar por las ofertas que fomentan el despilfarro». Así, la asociación considera clave «evitar el consumo masivo e innecesario».
«Lo de los libros es un despilfarro»
El gasto de 820 euros por hijo puede parecer alto. Pero, ¿y si lo multiplicamos por cinco? Ese es el caso de Lucía Gallego que, junto a su esposo Pablo, ha de afrontar los costes de cinco niños, entre los 20 meses y los 13 años de edad, y repartidos entre la guardería, tercero y cuarto de primaria, y primero y segundo de la ESO.
«En libros, por cada niño ya se van más de 500 euros», afirma Lucía, lo cual es «un auténtico despilfarro»: al final del curso «han llegado a la mitad del libro. En vez de comprar tantos, podían adquirir menos pero terminarlos. Estoy segura de que así nos ahorraríamos la mitad». Aparte, la posibilidad de que luego puedan heredarlos es remota: «De cien libros, sólo hemos podido aprovechar siete, porque cambian».
✕
Accede a tu cuenta para comentar