El Consell rescata a la SGR ante la falta de aportación de las cajas

VALENCIA- La pérdida de las cajas valencianas tiene consecuencias en distintos ámbitos de la economía. Uno menos conocido, pero que ha acabado repercutiendo en las arcas de la Generalitat, es la no aportación económica de las mismas a la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR), un ente financiero en el que, a parte de empresas privadas, participan instituciones públicas, Cámaras de Comercio y entidades financieras autóctonas.

La SGR ha tenido que realizar una ampliación de capital de 60 millones de euros para cumplir con los requisitos de capital marcados por el Banco de España. De esta cantidad, la mitad la tenía que aportar la Generalitat y los otros 30 millones las entidades financieras colaboradoras, es decir, Bancaja (Bankia), CAM (Banco CAM) y las cajas rurales.

Finalmente, han tenido que ser las cuentas públicas las que aportasen la totalidad de esta cantidad puesto que las cajas, cada una por sus motivos, no han pagado por el momento su parte.
Así lo explicó ayer el director general de la SGR, Juan Manuel García Puchol, quien aseguró que se han mantenido conversaciones con las cajas, pero sin resultado alguno por ahora.
Roca, por su parte, señaló que ha tratado el asunto con el vicepresidente de Bankia, Francisco Pons. La SGR pretendía que Bancaja aportara lo mismo a esta entidad que Caja Madrid a AvalMadrid (la SGR madrileña), pero, por lo visto, de momento eso no va a ocurrir.

Esta ampliación de capital se anunciará en la Junta General de accionistas convocada para el próximo lunes. Allí, además, todos los miembros del Consejo, incluidos el director y el presidente, pondrán su cargo a disposición de la Junta. «Creemos que es el momento de cerrar una etapa y dejar la puerta abierta», dijo García.

La situación que dejan a sus sucesores no es muy buena. A pesar de que el asunto de la ampliación de capital está resuelto (si la Generalitat no hubiera aportado los 60 millones, la SGR tendría que haber reducido capital o desaparecer), la sociedad cerró 2011 con unas pérdidas de 55 millones de euros. Según los dirigentes, se deben a las dotaciones realizadas para cumplir la normativa.