La renovada crisis de deuda lastra los diferenciales de los periféricos

Además, Rusia excluyó a España e Irlanda de la lista de países cuya deuda pública puede ser adquirida por los fondos soberanos del Gobierno, en un intento de reducir el riesgo en la gestión de los casi 92.585 millones de euros disponibles.

Así, el diferencial del bono irlandés a diez años se disparó por encima de los 500 puntos básicos, el máximo histórico desde la creación del euro, mientras que en el caso de Grecia se fue hasta los 865 puntos. En el caso de España, la prima de riesgo se situó cerca de los 190 puntos básicos, aunque la rentabilidad del bono español a diez años bajó hasta el 4,228%.

Al aumento de los diferenciales contribuyó de forma decisiva la reducción del interés del bono alemán a diez años, que acumula cinco sesiones de descensos y ya está en el 2,42% ante su condición de activo refugio contra las tensiones de la deuda soberana de los países periféricos.