Audiencia Nacional

Camps inocente

El calvario ha terminado. Un jurado popular, compuesto por seis hombres y tres mujeres, absolvió ayer al ex presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y al ex secretario general del PPCV, Ricardo Costa, por cinco votos a favor y cuatro en contra.

Camps inocente
Camps inocentelarazon

Valencia- Consideran que no cometieron un delito de cohecho impropio pasivo, es decir, que no recibieron regalos de la trama Gürtel, concretamente de la empresa Orange Market, que era la empresa que operaba en Valencia con Álvaro Pérez, «El Bigotes».
A las siete de la tarde, el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana avisaba de que el jurado tenía preparado su veredicto y convocaba a las partes de las siete y media.

Faltaban veinte minutos para las ocho de la tarde, y el portavoz del jurado leía el acta del veredicto. Camps y Costa permanecieron sentados junto a sus abogados.
Intentaron trasmitir seguridad junto a sus intentaron trasmitir seguridad, y lo consiguieron. A los pocos minutos de comenzar la lectura el resultado ya era claro. Francisco Camps iba a ser declarado inocente, y así fue. «No culpable». Camps miró al cielo, sonrió y respiró. La sala, repleta de los incondicionales de los acusados, realizó el último envite al magistrado Juan Climent. Estalló en aplausos, gritos… y tal y como había advertido al principio de la audiencia de ayer, y también en prácticamente todas las sesiones posteriores, ordenó el desalojo de la sala. Nadie quería moverse de allí, pero al final tuvieron que obedecer las órdenes del magistrado. Enfadado, llegó a obligar a la mujer del expresidente a que se marchase, aunque luego se arrepintió y la dejó permanecer en la sala ante la petición del abogado defensor, Javier Boix. Primer acto concluido.

Quedaba el segundo , que ya se vivió con menos tensión. La sala sin público, sólo los periodistas quedaron como espectadores. El portavoz del jurado retomó la lectura: «Por mayoría, con cinco votos a favor, encontramos a Camps no culpable del hecho delictivo de haber recibido regalos de prendas de vestir atendiendo a su función de presidente de la Generalitat» y siguió: «Declaramos a Ricardo Costa no culpable de un delito continuado de cohecho impropio pasivo». Camps se giró hacia Costa y se chocaron la mano. La penitencia había terminado.

 A continuación expusieron los hechos que les han llevado a tomar esta consideración. De los 21 puntos que componen el objeto del veredicto, el jurado ha considerado probados ocho puntos favorables a Camps y Costa, y señaló como no probados diez puntos contrarios a ellos, también por una mayoría de cinco a cuatro en ambos casos.
Así, el veredicto se argumenta en que consideran que la relación que había entre los cabecillas de la «Gürtel», Pablo Crespo, Álvaro Pérez y Francisco Correa, mantenían una relación con los acusados «meramente comercial».

Tras su deliberación, los jurados han concluido que no existe ningún documento legal para desacreditar que ellos mismos no fueron los que pagaron las prendas de ropa. Dan por válido el testimonio del escolta de Camps, que dijo que le prestó dinero para pagarlos y también el acta que firmó la secretaria de Costa ante notario afirmando que ella ordenó el pago de las prendas.

Apoyan estas declaraciones en las de administradora de varias empresas de la trama, Isabel Jordán afirmó que no podía asegurar que ellos no hubiesen abonado los regalos. Del mismo modo, remarcaron que las declaraciones del sastre José Tomás habían sido contradictorias, por lo que no sirven para confirmar los regalos.
Así mismo, el portavoz del jurado especificó que se ha tenido en cuenta el informe de la Agencia Tributaria encargado por la Fiscalía que concluía que no podían demostrarse los regalos.

También consideran probado que no tenían capacidad para adjudicar contratos públicos. 

 

Extractos del veredicto
1 «La relación de Álvaro Pérez, Pablo Crespo y Francisco Correa con los acusados era meramente comercial»
2 «No hay ningún documento mercantil que acredite pagos de prendas que imputen a los acusados». Lo corroboran basándose en la declaración de Isabel Jordán, administradora de varias empresas de la trama. También han utilizado las contradicciones del sastre José Tomás, que afirmó ante la Fiscalía y la Policía que Camps le pagó las prendas al contado, para cambiar en una tercera declaración su versión».
3 «No se puede afirmar que los bultos que transportó Transaher desde Milano y Forever Young a Valencia fuesen para los acusados»
4 «No existe documentación en la causa relativa a la confección en la que se identifique la prenda con cada cliente, por lo que no se pueda constatar la confección de prendas con los tiques de venta». El documento 71, uno de los más utilizados por las acusaciones porque recoge el nombre de Camps y Costa con unas deudas, «carece de credibilidad».
5 «No hay documentación que acredite que Camps no se pagara los trajes» que él aseguró abonar en Forever Young. Consideran creíble el testimonio del escolta que afirma que le prestó dinero. También afirman que Costa pagó sus prendas, como dijo su secretaria».